El canciller de Venezuela, Yván Gil, se mofó el 15 de marzo de una reunión entre el Departamento de Estado de Estados Unidos y la exdiputada opositora Dinorah Figuera, quien lidera un grupo de exparlamentarios opositores elegidos en 2015.
En tono de burla, Gil deseó, a través de Twitter, «el mayor éxito al Departamento de Estado de EE.UU. en la edificación de las relaciones con Narnia».
A juicio del canciller, este reciente «encuentro risible» confirma el «infantil empeño de EE.UU. de promover una fantasía política y diplomática fracasada».
Con este mensaje, respondió a una publicación del subsecretario estadounidense de Asuntos del Hemisferio Occidental, Brian A. Nichols, quien informó del encuentro con la representante de la «última institución democráticamente electa en Venezuela».
«Seguimos apoyándola a ella y a los esfuerzos de la Asamblea Nacional para devolver a Venezuela la democracia que su pueblo merece», había expresado el funcionario en su cuenta de Twitter.
El Departamento de Estado afirmó, el pasado mes, que sigue reconociendo a la Asamblea Nacional elegida en 2015 con mayoría opositora, porque considera que es «la última institución elegida democráticamente que queda en Venezuela».
“Seguimos indoblegables”
Figuera aseguró, el 10 de enero, que seguirá de forma «indoblegable» en sus reivindicaciones políticas contra «la dictadura de (Nicolás) Maduro», pese a la orden de captura en su contra.
En una entrevista que concedió a EFE, señaló que lo hará para luchar por «la preservación de los activos de Venezuela en el extranjero y la reivindicación de unas elecciones libres en 2024 en las que puedan votar los migrantes venezolanos».
Además de contra Figuera, un tribunal de Caracas emitió orden de captura contra Marianela Fernández y Auristela Vásquez, primera y segunda vicepresidenta de la AN electa en 2015.
Tanto a Figuera como a sus compañeras se les acusa de «delitos de usurpación de funciones, traición a la patria, legitimación de capitales y asociación para delinquir», entre otros.
«Siempre hemos sido criminalizados y estigmatizados por la dictadura de Maduro», señaló Figuera.
