«Ten cuidado en tus mejores momentos.
Es cuando el diablo viene por ti».
Santo Cura de Ars
Has caído de mi gracia y recibirás tu castigo, así dice el Señor. Haces con tu libertad un libertinaje y con tu libre albedrío tu condenación. El coronel Marión, el psicópata repulsivo y Maurén la operada, disfrutan de su fiesta de corrupción abonando el terreno para ganarse no solo la cárcel de los hombres sino la eternidad del infierno. Son hábiles justificándose por sus hazañas criminales y les importa un bledo sus reputaciones ante la sociedad y mucho menos ante Dios. No se olviden de Dios, que todos tendremos que darle cuenta en su debido momento. Ay Isabel, Chuchín, Alejandro, Joselito, Jackson, Francisco, las cocineras y los choferes, y todos cuantos le rinden pleitesía a la corrupción y participan de ella, porque se sienten alcahueteados y protegidos por el coronel psicópata; todo ese mundo de desenfreno ético y de inmoralidades está siendo escrito en sus almas y aunque ahora mismo les resbala cualquier consideración espiritual o moral, el día llegará que han de entregar cuentas en la tierra o en el juicio de muerte ante Dios.
Parafraseando a Víctor Hugo, entre el coronel psicópata que es un delincuente de siete suelas y los empleados y los usuarios que lo consienten, hay cierta complicidad vergonzosa. Y como diría Simone de Beauvoir, el corrupto coronel psicópata no sería impune si no tuviese cómplices entre los propios funcionarios, los usuarios extorsionados y los sobornarios. Como ya es harta conocida la complicidad y coautoría delincuencial que mantiene cinco para las doce allá en el distrito, que es quien lo sostiene en la institución, no obstante enésimas denuncias y pruebas que se le han hecho llegar, su superior se hace el güevón, como si la cosa no fuera con él y contrariamente a toda la vox populi y al desprecio que se siente por este narcisista , licántropo y voyerista por ser un criminal y corrupto; cinco para las doce ha dejado ante las riendas descarriadas de la institución a su tributario el sargento de tropa homologado, a cambio de miles de dólares semanales . Sí, en poco tiempo el superior del coronel psicópata ha demostrado que es un inmoral y cómplice del licántropo narcisista y voyerista. En tan poco tiempo dio a conocer su personalidad, y su inmoralidad.
En la institución que jefatura el coronel psicópata hay un co-gobierno, alcahueteado por este siniestro militar en el que ambos Marión y Maurén depredan en simbiosis a la empresa. Par de sanguijuelas con títulos fraudulentos de doctores y que son antagónicos a la corporación, se aprovechan de su nombre y de su giro para hacerse de miles y miles de dólares, de dinero negro para sus arcas personales. Maurén la operada por segunda vez, se hizo la cintura, las nalgas y las tetas con los dólares que extorsiona a los usuarios y de las cuotas criminales que le tocan por la venta ilícita de documentos. Maurén le compró a su padre una camioneta con dinero sucio, manchado de deshonor y desvergüenza; pero además pretende comprar a Dios siendo muy generosa con el Pastor de su iglesia, a quien tiene cebado, pero no le dice de dónde saca tantos dólares para el diezmo. Dios sabe de dónde sacas ese dinero Maurén, que no sirve precisamente para la causa de la iglesia, sino para la causa del Pastor. No creas que con ello te estés comprando tu entrada al cielo, porque ese dinero que diezmas lo has obtenido de la necesidad de otros que incluso pasan hambre para pagar tus extorsiones. Porque ese dinero no es de procedencia lícita y mucho menos divina.
Como un aborto satánico de entre las filas del “cristianismo” salió Maurén la mayor expresión de la corrupción, que en apostasía es imitadora del coronel psicópata y no precisamente de Cristo. A Maurén no le importa lo que Dios opina de ella, pues no anda dándole gusto a Dios sino al diablo. Se tienen registros fílmicos y fotográficos, además de otras pruebas irrefutables y contundentes de las adquisiciones y opulencias de Maurén con dineros que no podría justificar con su salario de funcionaria pública.
El idiota moral, el sargento de tropa homologado que solo llegó hasta coronel por su mal comportamiento, únicamente tiene amistad con los burros de su mismo pelo, no tiene ascendencia política, por lo que se une con Maurén que es quien se la proporciona. En tal sentido, se trata de una asociación para delinquir enmascarada en una fachada de legalidad. Lo expongo de este modo, como quien tiene una choza para vender comestibles, pero que al correr el velo, “eureka“, nos enteramos de que en realidad vende drogas. Pues así han hecho con la institución, en razón de su nombre y de su prestigio por ahora perdido, la han convertido en un antro de delincuentes. La seriedad con que se hacen ver es el más embaucador disfraz para delinquir. Estos dos Marión y Maurén tienen su choza del crimen usando como sede a la institución y en donde venden todo lo que sus deformadas mentes se les ocurra; pero eso sí, todo ilegal, ilícito, contrario a la moral y a la ética. Aquí está el dinero dice Maurén, esto es una mina, sigamos con la extorsión.
Maurén sí está, se mantiene estratégicamente oculta, mientras su influjo es dominante en la institución. Maurén es la que toma en las fiestas y en las reuniones las fotos en las que convenientemente no figura, porque ese es su planeamiento, que el colectivo piense que ella ya no está. Sólo los cómplices y los monos voladores del coronel psicópata comparten y departen con ella en sitios exclusivos, pero es tan evidente su presencia que no puede disimular la presunción y la jactancia de exponer en sus círculos íntimos de cómo se llena de dólares mal habidos con los negocios sucios de extorsión, chantaje y venta de títulos valores estafa, que tiene junto al coronel psicópata en la institución.
Maurén es una de las manos siniestras del coronel psicópata. Ella trajo a la institución su propia legión del mal, sus leales delincuentes. Las fichas que le dan y entregan cuenta a ella y no al coronel, además de los dólares de las extorsiones diarias en la empresa, que van para su bolsa. Por lo que los usuarios sufren un doble abuso porque hay dos gobiernos internos delincuentes a quienes sostener. Estos abusos poseen sus propias estructuras cuyas demandas criminales tienen que saciar los usuarios so pena de ser sometidos a grandes injusticias. El pago de coimas, extorsiones y las agresiones sexuales están a la orden del día, pero también de la noche. El que no paga, entonces debe soportar las consecuencias criminales, crueles y autoritarias de la red de Maurén y Marión.
Aunque los dos rostros más visibles de Maurén en la institución son Francisco y el asistente virtual, ella tiene mucha mayor tropa que se encarga de inventar violaciones a los usuarios para la extorsión en dólares sucios que reciben ella y el homologado. Pero Maurén tiene adentro mucha más gente de la que podamos pensar. Entre los que mencionaremos la red duancajea y con ellos la Martínez, compañeritos de ella que trajo de al lado. Para esos menesteres ha sido determinante la complicidad criminal de Sussana y el coronel quien es el que da la orden de incorporarlos a depredar a esta empresa víctima. Cuánta desgracia ha tenido esta empresa de que esta gente desalmada, sin principios, sin valores, sin moral y flagrantes violadores de la ley, se hayan interpuesto en las nobles tareas que por misión, visión y fines tiene esta corporación. El coronel y Maurén se han limpiado el culo con los documentos y la filosofía que le dan vida y fundamentación a la institución. Así como dice Pierina, “yo me limpio el culo con las leyes”.
Pero también trajo Maurén a la institución, al despertar de la delincuencia, la gente de su barrio; a Joselito y a su mujer; quienes son apenas muestras de la cantidad de criminales que pululan en la empresa disfrazados de gente decente. La institución los tiene marcados. Mauren designada palabrera para evitar que el expulsado Ananás, en defensa de su dignidad luego de tan denigrante humillación, descubra y exponga los negocios y los crímenes que pululan en la institución de manos del coronel y de ella. No vayas a decir nada, no vayas a soltar la sopa, trágate tu enojo y tu dignidad. Ya bastante te lucraste de la corrupción, tómalo como tu retribución para guardar silencio. ¿Qué hará entonces Ananás?
Dios hoy te presenta la oportunidad de cambiar y de enmendarte, porque Él es el sanador, Él es el restaurador. Vives tu vida muy ocupada tratando de tener éxito por vías ilícitas, de hacer dinero corrupto. El dinero, el éxito, la influencia, tus vehículos, tus mansiones todo se queda aquí en la tierra cuando mueras. Dios no se impresiona por lo que tú tienes y menos si es producto de la corrupción, porque con ello lo ofendes y peor aún eres causa de abominación ante sus ojos. Dios se impresiona cuando ve tu corazón limpio y puro, porque es lo único valioso para poder enseñar cuando debas estar en su presencia ante su tribunal para dar cuentas, tarde o temprano. Todo el resto de basura, se queda aquí en la tierra.
Maurén así como el coronel se roba la comida de la institución y además le montó un minimarket a Isabel con la comida de todos, también se sabe de ti que te robas la comida y de cómo Joselito mete en tu automóvil las bolsas con pollos que debieran ser destinados para los más necesitados y tú te apoderas de lo que no es tuyo igual que el coronel. Sinvergüenzas, ladrones, lacras.
Fíjense cómo los psicópatas al tomar las riendas de las instituciones las corrompen. Toda esta destrucción de la ética, la moral, las buenas costumbres y los valores que se presumen vienen de la crianza en la familia y de los padres; su homicida es el coronel psicópata que es el demoledor de la gracia y de lo sagrado, pues se ha encargado de pulverizar lo bueno y lo digno en quienes ahora mismo les es indiferente toda esta malignidad y ha logrado que muchos se encojan de hombros en un dejar hacer y un dejar pasar, para burla de sus padres, de la sociedad y de Dios. Cuan vergonzantes escenarios se viven en la institución que jefatura el coronel psicópata. A Marión, el felón psicópata y a Maurén, les concierne leer: “han caído de mi gracia y recibirán su castigo, así dice el Señor”.
Las jovencitas y los chicos ofendidos en agresión sexual,
son sus pasaportes al infierno, malditos, desgraciados.
Crisanto Gregorio León
Crisanto Gregorio León
