El escritor peruano Mario Vargas Llosa, ingresó este jueves, 9 de febrero, en la Academia Francesa, siendo la primera persona de lengua hispana en ingresar en la prestigiosa institución fundada en 1635.
A sus 86 años, el escritor peruano entra a formar parte de un club selecto en el que figuran nombres como Victor Hugo, Montesquieu o Louis Pasteur. La elección se dio a conocer en 2021, pero este jueves 9 de febrero se oficializó su acceso.
El también laureado con el premio Nobel, se encuentra en Francia con su familia. Incluso lo acompaña su exesposa, lo que representa la fuerza simbólica del momento. «Una vieja historia de amor», tuiteó su hijo Álvaro, acompañado de una foto de su padre observando la emblemática torre Eiffel.
Su discurso abordó por igual su pasión por la literatura, en particular la francesa, y la política, en particular la denuncia de los autoritarismos. «La novela salvará la democracia o se hundirá con ella y desaparecerá«, dijo el nuevo «inmortal», como se conoce a los académicos franceses.
Vargas Llosa recordó que cuando estudiaba en Lima, «aspiraba secretamente a convertirme en un escritor francés. Estaba convencido de que era imposible ser escritor en Perú, un país sin editoriales y con escasas librerías», explicó.
Al llegar descubrió con sorpresa que en «la capital cultural del mundo» se leía desde hacía tiempo a autores como el mexicano Octavio Paz. «Fue en consecuencia gracias a Francia que descubrí otra América Latina», dijo.
«Fue en París que me convertí en escritor», añadió. «Sin Flaubert nunca habría sido el escritor que soy, ni habría escrito lo que he escrito”.
Último superviviente de la generación del «boom» latinoamericano, Vargas Llosa es autor de novelas que marcaron las letras hispanas del siglo XX, como Conversación en la catedral y La ciudad y los perros.