Trabajo de www.lanacionweb.com
Funcionarios de Migración Colombia ya no están apostados en las casillas cercanas al puente internacional Simón Bolívar, punto donde estaban reubicados desde su retiro de la mitad del tramo binacional, el pasado 1° de diciembre del 2022.
El objetivo, explicó en ese entonces el director de la institución colombiana, Fernando García, era garantizar mayor fluidez de los peatones por el tramo binacional. Además, ambos países manejaban la reapertura total para el 1° de enero, escenario que no se dio, pues solo hay paso vehicular por el recién inaugurado puente internacional Atanasio Girardot.
En los últimos días, Migración Colombia también se retiró de las casillas. Ya no hay presencia de estos uniformados en las adyacencias al puente. Se encuentran en las instalaciones donde funcionan sus oficinas.
Aún no se conoce si la medida será temporal o definitiva. Por los momentos, al cruzar hacia el vecino país, por el trayecto que conecta a San Antonio del Táchira con La Parada, solo se ven algunos funcionarios de la Policía de Colombia, apostados en diversos puntos. Los que sí siguen en las casillas son los funcionarios de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN), encargados de regular la mercancía que puede salir del país.
La imagen de funcionarios chequeando los documentos de identidad a los transeúntes ya no es común ni en el puente, lado colombiano, ni en las adyacencias. Hay una movilidad mucho más fluida en esos puntos que contrasta con el trayecto venezolano.
Los funcionarios venezolanos de diversos organismos de seguridad ciudadana como la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y Migración Venezuela siguen visibles en el paso binacional, además de los túneles y vallas, estructuras que no se han removido y que el vecino sí retiró durante las últimas semanas del 2022.
Otras instituciones que también están operando en las cercanías del puente, más hacia la aduana, son Interpol y el Seniat. Para muchos ciudadanos la cantidad de funcionarios es excesiva, pues se hallan en varios puntos que conducen al paso binacional.
«Se entiende que es un paso internacional y debe haber controles. Pero uno pasa a Colombia y ve lo más esencial, inclusive han reducido su presencia, y acá cada día son más los funcionarios y cuerpos de seguridad que hacen presencia, hasta el CONAS suele tener su punto cuando lo desea», manifestó Marlon Rojas, transeúnte.
Rojas tiene la convicción de que tantos controles no contribuyen en la armonía y tranquilidad de un tramo binacional. «Del lado venezolano están en todos lados, desde el puente y hasta la aduana», argumentó el joven de 34 años.
«Otro punto es por qué si nos revisan en el puente, también lo hacen a la altura de la plaza la Confraternidad y en la aduana», resaltó mientras instaba a las autoridades a generar más confianza con las acciones.
Los ciudadanos siguen expresando la necesidad de que el puente de San Antonio esté abierto las 24 horas, no por 15 horas, como viene operando en la actualidad: de 6:00 a.m. a 9:00 p.m.
