A propósito de la eliminación de la presidencia del gobierno interino de Juan Guaidó, que éste ha venido fungiendo tras alcanzar la presidencia de la Asamblea Nacional del 2015, la Plataforma Unitaria ha implosionado.
Tal es el criterio del doctor Rafael Simón Jiménez, exvicepresidente de la Asamblea Nacional, exrector del Consejo Nacional Electoral, profesional del Derecho, docente universitario y analista político.
Beneficiarios
Todos en su momento se han beneficiado y se van a seguir beneficiando del llamado gobierno interino, expuso el experimentado político al ser consultado por El Impulso.
La decisión de la Asamblea Nacional del 2015, expuso, es sustituir a Guaidó por unas comisiones que van a administrar los bienes de la República y, al final, van a seguir obteniendo beneficios de una serie de activos que Venezuela tiene en el exterior.
Esa determinación hace que la Plataforma Unitaria implosione y lleve al nivel más crítico a la unidad venezolana, porque mal o bien, así fuese por intereses crematísticos, esa agrupación o G-4 era un ente compactado.
El hecho de que se haya roto y se presente un conflicto entre lo que sería el G-3 y Voluntad Popular coloca las cosas en un punto muy crítico.
Atomización y conflictividad
Particularmente, yo pienso, como lo hago siempre positivamente, que ese punto crítico de la oposición venezolana de atomización y conflictividad, pueda llevar a un punto cero, a partir del cual el año que viene haya un intento fuerte por lograr la unidad por el hecho de que en el 2024 haya elecciones presidenciales en Venezuela.
Tienen que darse cuenta que si la oposición no se presenta unida van de nuevo permitirle al señor Nicolás Maduro que éste con apenas el 20 por ciento del apoyo popular, que es lo que tiene, pueda fortalecerse y convertirse nuevamente en presidente por seis años más, lo que sería una auténtica desgracia.
Ninguna utilidad
Para el doctor Jiménez, el llamado gobierno interino nunca ha tenido ninguna utilidad, porque, según sus propias palabras, ha sido más bien un elemento de dificultad para poder compactar una estrategia que nos lleve a salir de este régimen.
Ese gobierno interino ha sido un ente burocrático, a partir del cual se han presentado escándalos de corrupción en las empresas Monómeros y Citgo, las acusaciones de unos y otros, el caso de la ayuda humanitaria.
Todo esto, reiteró, ha sido un factor de dificultad para poder trazar una estrategia exitosa que nos conduzca a salir de este gobierno y, por supuesto, de la crisis que hemos venido sufriendo.
Sin justificación
En cuanto al hecho de que Guaidó no sólo fue presidente de la Asamblea Nacional, sino que también fue apoyado por ese organismo como presidente interino de Venezuela, el doctor Jiménez dijo que uno siente pena ajena con algunos abogados, muy respetados, quienes en el plano constitucional pretenden justificar la existencia de un gobierno interino.
Eso no tiene justificación, sentenció el doctor Jiménez. Si a Maduro se le está acusando de usurpar y controlar todos los poderes, es de imaginarse lo que significa que el presidente de la Asamblea Nacional también sea presidente de la República.
Esa circunstancia solamente está prevista en el artículo 233, como un caso excepcional cuando antes de la toma de posesión haya una falta absoluta del presidente y, en este caso, se dice que debe ser convocadas, en treinta días, nuevas elecciones; es decir, es inconcebible que el presidente de la Asamblea Nacional ocupe el Poder Ejecutivo por más de treinta días Y en ese caso tiene que ser sustituido como cosa aberrante.
Decisión de EEUU
Estima el doctor Jiménez como positivo eliminar el gobierno interino. Pero, el tema sigue siendo los intereses económicos que subsisten.
Porque la liquidación del gobierno interino podemos decir que es la eliminación de Guaidó y lo que él representa.
Pero, cuando estos señores dejan tres comisiones para administrar fondos, los activos que venía administrando el llamado gobierno interino, la situación queda en lo mismo.
Lo que se ha hecho es sacar a Guaidó, manifestó el doctor Jiménez. Todavía eso no se ha concretado, porque falta otra sesión fijada para el día 29.
Pero, aparte de eso, hay un factor muy importante a considerar, advierte. Es la posición que asumirán los Estados Unidos, la cual decidirá todo.
En todo caso tiene para escoger dos posiciones. Una, como ya lo había tomado en el pasado, que era presionar todo a los factores del G-3 para que respaldaran a Guaidó: y la otra, que se ha anunciado sin confirmación aún, es la OFAC, la oficina que maneja los fondos retenidos en el exterior, diga que Guaidó es el único que puede seguir administrándolos.
En ambos casos la situación se deriva hacia un conflicto y un punto que hace incrementar la ya atomizada y conflictiva oposición.
Incluir a chavistas
Es por eso, declaró el doctor Jiménez, que yo pido a Dios, en estos días navideños, que este conflicto que ha llevado a implosionar a los factores más o menos unidos de la oposición sirva para que en el 2.023 comencemos un esfuerzo unitario, a partir de cero, que nos conduzca a lo que obligatoriamente tiene que ser: que si no nos unimos para el 2024, el señor Maduro va a volver a ganar con una minoría.
Y lo que tiene que ser es un amplísimo movimiento que incluya, no solamente a todos los factores de la oposición, sino también a los disidentes del chavismo y a quienes dentro del chavismo puedan plantear, de ahora en adelante, posiciones favorables a un cambio político. Tiene que ser una plataforma de unida, d asbsoluta, total, en la cual solamente se excluya, quien se quiera excluir.