Trabajo de www.eltiempove.com
A pesar de que al salir a la calle da la impresión de que el estado Anzoátegui ya no está padeciendo la pandemia de COVID-19 que llegó al suelo oriental en marzo de 2020, la realidad es que este virus mortal sigue estando más latente que nunca.
Sólo basta con visitar algún sitio público, ir al trabajo o estar en la casa de algún familiar para darse cuenta de que aún hay mucha gente con síntomas de la enfermedad; en algunos casos leves, mientras que en otros no.
No obstante, pareciera que así como un día el confinamiento se volvió «la nueva normalidad«, ahora pareciera que tener indicios del coronavirus o andar con alguien que posea esos síntomas es algo común y no es motivo de alarma.
Hasta el incumplimiento de las medidas de bioseguridad se ha vuelto tan normal que en la actualidad si una persona porta una mascarilla es visto como «alguien extraño«.
Todos estos indicios son los que han llevado a pensar que en esta Navidad es probable que se dé un rebrote de COVID-19 en el estado Anzoátegui.
Incluso, el presidente del Colegio de Médicos de la entidad, Víctor Velásquez, asegura que el número de contagios «ya está aumentando».
«Era previsible y no es solo en Venezuela, también a nivel mundial. Se bajó muchísimo la guardia en cuanto a medidas de bioseguridad. Hay muchas situaciones que han permitido que la gente se vuelva a reunir, se abrieron los salones de clase, tenemos el mundial en pleno apogeo, las navidades, y la gente dejó de tomar las medidas de bioseguridad porque piensan que el COVID se acabó. El COVID no se ha apagado, sigue latente, solo que hay una nueva variante que la gente asume que es menos agresiva que la inicial», señaló el pasado 8 de diciembre en entrevista para El Tiempo.
A juicio del gremialista, en estos momentos la ciudadanía se está tomando la pandemia «a la ligera«.
«Si cuando estábamos en plena pandemia la gente tenía COVID y decía que lo que tenía era gripe, ahora sigue creyendo que lo que tiene es gripe. La gente dice que ́eso es gripe lo que tengo ́. El otro detalle es que el COVID no solo se está manifestando con patologías respiratorias, sino también con problemas gastrointestinales, como diarrea y dolor en el cuerpo. Pero hay algo que es muy importante, que la gente tiene que saber, que así como el virus mutó y aparentemente se hizo menos agresivo puede llegar el momento en que el virus, en una de esas mutaciones, se vuelva a hacer más agresivo y la gente sigue creyendo que ya todo pasó», resaltó.
«Sin llegar a los extremos de un confinamiento que no tiene sentido, se deben retomar las medidas de bioseguridad. Como el distanciamiento físico no se está cumpliendo, básicamente la gente debería usar su tapaboca y hacer lavado de manos de forma continua, porque es poco o nada lo que se está haciendo desde los organismos de salud en función de la pandemia. Esa es la gran realidad que tenemos ahorita».
Pruebas
Algo que llama la atención es que según las cifras divulgadas por el gobierno nacional en los últimos meses se han reportado pocos casos de coronavirus en Anzoátegui.
Según los reportes diarios del Estado, en septiembre se detectaron apenas cinco contagios, en octubre 12 y en noviembre tan sólo nueve.
Sobre este aspecto, el presidente del Colegio de Médicos explicó que existen dos factores que no permiten tener una cifra más cercana a la realidad.
El primero, expresó, tiene que ver con que las autoridades no están haciendo el «muestreo completo» en la actualidad.
Y en segundo lugar, señaló, las personas contagiadas con la enfermedad no están asistiendo a los centros asistenciales, sino solamente cuando se encuentran en muy malas condiciones. «Mucha gente termina de pasar la enfermedad en su casa«, añadió Velásquez.
Medidas
El dirigente gremial afirmó que según los estudios del Colegio de Médicos apenas 10% de la población está utilizando tapabocas en estos momentos.
«Entras a cualquier espacio, llámense restaurant, centro comercial o automercado, y de cada 10 personas encuentras a uno que tiene tapabocas. Ya nadie usa máscara facial, nadie respeta el distanciamiento físico y eso no es solamente en la población común, incluso nosotros los médicos en los centros asistenciales hemos relajado muchísimo las normas de bioseguridad. Entonces cobra fuerza eso de que al COVID lo vamos a tener por mucho más tiempo, o la gente se va a acostumbrar a que se van a enfermar, complicar o pueden llegar hasta la muerte, como consecuencia del COVID-19, y eso es una realidad que no puede negar nadie», apuntó.
Lo expresado por Velásquez fue confirmado por la licenciada Daniela Rivas, quien contó que hace días varias personas la vieron «raro» por usar mascarilla.
«Me monté en un carrito y tanto el chofer como los cuatro pasajeros que venían conmigo estaban sin tapabocas. Como yo sí lo tenía sentí que todos me estaban viendo como un extraterrestre. Yo prefiero seguir con mis medidas porque todos los días veo gente con síntomas de gripe«, manifestó.
«Cuando se trata de una influenza gestacional o un catarro, como se le llama vulgarmente, esa es una situación que dura dos días: dos días de malestar, dos días de fiebre y ya, desaparece totalmente, mientras que el COVID-19 no desaparece en dos días».
Llamado
Ante el incremento de casos de pacientes con síntomas asociados al coronavirus, el coordinador general del Movimiento de Trabajadores de la Salud (Motrasalud), Edisson Hernández, exhortó a la población de Anzoátegui a no dejar de usar las mascarillas y a cumplir con las demás medidas de bioseguridad.
Afirmó que «la pandemia no se ha ido y ya se nota un rebrote de la enfermedad. A los centros de salud llegan muchas personas, incluso asintomáticas, y cuando les hacen las pruebas salen positivas para COVID-19″.
El coordinador general de Motrasalud, Edisson Hernández, denunció que en el hospital Razetti persiste el déficit de personal en las áreas donde se atienden pacientes con COVID-19. «Por ejemplo, en el área de emergencia hay un camillero nada más, cinco médicos y dos enfermeras. Aquí debería haber seis enfermeras como mínimo», dijo.
Indicó que un ejemplo del rebrote se puede observar en el Hospital Universitario Dr. Luis Razetti de Barcelona, principal centro de salud del estado.
«Hace 15 días (mediados de noviembre) en el área COVID-19 de la emergencia del hospital teníamos tres o cuatro pacientes, ahorita ya hay siete, mientras que en el piso 2 del recinto había sólo cinco pacientes y en la actualidad hay 13 que están siendo tratados por tener COVID. En esta Navidad hay posibilidad de un gran rebrote de la enfermedad. Pudiéramos llegar a tiempo de colapso (del hospital), porque la gente anda de forma inconsciente en la calle», acotó.
Es por ello que Hernández instó, una vez más, a la ciudadanía a retomar las medidas de prevención del virus, ya que «el COVID-19 no se ha ido y tenemos que estar alerta«.
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