Habitantes del sector Guayamure de Río Claro, en la parroquia Juares del municipio Iribarren, que resultaron afectados por las intensas lluvias y crecidas, continúan a la espera por ser reubicados.
El equipo periodístico de El Impulso visitó Guayamure, uno de los sectores más afectados el pasado mes por la crecida de quebradas y el Río Claro, para conversar con las personas afectadas.
Los consultados aseguraron que las autoridades apoyaron las primeras semanas después de lo ocurrido, pero que a la fecha quedaron cosas por hacer, como: limpiar algunas calles que permanecen llenas de lodo y escombros, embaular los zanjones o reubicar a familias que residen en viviendas que están en riesgo.
Afirman que para estas fechas, mediados de noviembre, solo se ha visto una máquina y poco ha sido su uso para la continuidad de las labores de restauración de la vía.
“Necesitamos que se aboquen a traer las máquinas nuevamente porque una nueva creciente nos dejará sin casa”, dijo Carlos Peraza.
Por su parte, Marbella Graterol, también de Guayamure en el sector La Escuela, aprovechó las cámaras de El Impulso para pedir apoyo a las autoridades, ya que su vivienda sufrió graves daños tras la crecida y hasta los momentos no ha sido reubicada.
