Este martes 25 de octubre el Paris Saint-Germain tuvo una «noche mágica» en la Champions League. El club francés goleó 7-2 al Maccabi Haifa para sellar su clasificación a los octavos de final de la competición, en un partido donde Lionel Messi, Neymar Jr. y Kylian Mbappé, volvieron a brillar.
Neymar marcó un gol, Mbappé anotó dos y Messi también se unió a la fiesta con un doblete. El temido tridente del club parisino se combinó con pases entre líneas, dribles, anotaciones y un espectáculo general, convirtiendo esta jornada en una fiesta para los fanáticos del PSG.
Sin embargo, a menos de un mes del inicio del mundial, uno de los principales temores de los fanáticos del fútbol es que los jugadores de élite no se lesionen. Durante los últimos días, se han visto escenas preocupantes de jugadores como Gavi, Federico Valverde y Diogo Jota, quienes han sufrido fuertes entradas o malos movimientos en los juegos, llevándolos al riesgo de una lesión; en el caso del último mencionado, se confirmó que no podrá participar en Qatar 2022 con Portugal por lesión.
Es por eso que en este juego del PSG, cuando ya estaba sentenciado al minuto 72, ganando 6-2, ocurrió una escena que asustó a millones de espectadores: Lionel Messi conducía el balón cuando un jugador intentó interceptarlo por detrás, a lo que el astro argentino se detuvo y levantó su brazo, un gesto que suele significar que hay una molestia o lesión.
De hecho, Mariano Closs, el reconocido narrador argentino de la cadena deportiva ESPN, al ver este gesto de Messi, exclamó con preocupación: «Le tiró, le tiró a Messi», haciendo alusión a algún tirón físico en la pierna del 10 de Argentina.
Tras un par de segundos de preocupación, se observó cómo Messi se inclina para lanzarse al suelo, pero en lugar de ser por una lesión, la pausa que realizó Lionel se debió a que su rival le pisó la parte de atrás del botín, sacándoselo medianamente de su pie.
Al ver que Messi solo se estaba arreglando su botín, Mariano Closs comentó: «Ah no, le sacó el zapato. ¡Qué susto! Es que se puso la palma en la pierna, menos mal».
