Tras el cierre de dos estaciones de servicio de la localidad de Pueblo Nuevo, capital del municipio Falcón, conductores de las diferentes líneas urbanas han señalado que el 50 % de la flota vehicular que presta servicio a los usuarios está paralizada por falta de combustible.
José Lugo, presidente de la línea de conductores Adícora, hace un llamado al gobernador del estado, Victor Clark, y a las autoridades competentes para que se aboquen a buscar una solución a esta situación ya que no solo son afectados ellos, sino todos conductores, y por ende la colectividad.
Se conoció que recientemente se realizó una inspección a las dos estaciones de servicio en Pueblo Nuevo por parte de funcionarios de PDVSA, sin embargo, habían prometido que los próximos días se reabriría uno de estos establecimientos pero hasta la fecha no se ha concretado.
Por su parte, uno de los transportistas afectados, Wilmen Gutiérrez dijo «queremos que nos ayuden, que dejen a un lado las situaciones políticas ya que el que verdaderamente sufre es el pueblo, nosotros necesitamos el combustible para trabajar y llevar sustento a la casa».
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