Partiendo desde la sede central de Corpoelec en San Felipe, capital de Yaracuy un importante número de trabajadores de la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) marcharon la mañana de este #29Sep en rechazo a lo que han denominado tratos injustos para quienes día a día laboran en las diferentes oficinas en Yaracuy.
Esteban Alvarado, presidente del Sindicato de Corpoelec informó que son más de 1.000 trabajadores que esperan desde el año 2018 por la discusión del Contrato Colectivo, el cual fue paralizado en ese momento por la reconversión monetaria, sin embargo, ha pasado el tiempo y no dan respuesta a los diferentes llamados que han realizado.
«Hemos decidido sumarnos a esta jornada nacional de protesta, ya que no aceptamos que mientras nuestro contrato colectivo se encuentra congelado otros sectores de la administración pública ya están en discusión, no somos ni más ni menos que los demás», explicó.
Dijo además que todas estas acciones dejan ver que los jefes de Corpoelec le tienen odio a sus trabajadores, siendo importante acotar que acá se ven afectados 700 activos y 300 jubilados, estos últimos esperando que les cancelen el bono recreacional, personas que necesitan el dinero para comprar sus medicinas.
«Nos mantendremos en la calle»
El vocero de los manifestantes informó al llegar a la sede de la Inspectoría del Trabajo que luego de entregar el documento en el que detallan la difícil situación que atraviesan estos padres de familias, se reunirán para determinar las próximas acciones pacíficas a seguir, hasta lograr las mejoras en sueldos y salarios.
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