El presidente interino, Juan Guaidó, se pronunció este martes 27 de septiembre sobre la reciente actualización del informe de la ONU sobre Venezuela, donde narró testimonios de las víctimas y exigió justicia ante las violaciones de derechos humanos.
Durante la rueda de prensa, Guaidó destacó que la «responsabilidad» del Gobierno Interino es «procurar justicia en Venezuela», haciendo un llamado a la comunidad internacional a respaldar la continuidad de la Misión de la ONU en el país.
Así mismo, afirmó que el embajador de la administración de Nicolás Maduro, Héctor Constant, «amenazó» a los países miembros del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas ante una posible renovación de la Misión.
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«Vimos el desparpajo con cual el representante de Maduro amenazaba a países miembros del Consejo de Derechos Humanos si aprueban la continuidad de la misión (…) esto explica las violaciones de derechos humanos y torturas a las victimas», dijo.
En este sentido, aseguró que «Maduro se cree Putin al amenazar a países, copian el patrón de quien es su principal socio a nivel mundial».
El mandatario interino agregó que «el gran llamado del Parlamento nacional y por supuesto el mío es que siga la Misión para proteger a las victimas, para narrar los crímenes de la dictadura. Y un llamado a la reflexión, no es suficiente ser narradores y descriptores de crisis humanitaria, hay que tomar acción por la dignidad humana, hay que tomar acción por la recuperación de la democracia y los derechos humanos», sentenció.
En este contexto, el también presidente de la Asamblea Nacional electa en 2015, destacó que su compromiso «es mayor» y pidió a la sociedad venezolana informar de lo que ocurre en Venezuela.
«Deben volverse multiplicadores de los que han resistido torturas y están tras las rejas por persecución política, que busquemos justicia para lograr democracia en Venezuela».
«Nosotros asumimos la responsabilidad de buscar justicia y democracia», concluyó Guaidó
Cabe resaltar que la presidenta de la Misión de investigación de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Marta Valiñas, destacó que en el informe sobre Venezuela actualizado el pasado martes, se documentaron violaciones de los derechos humanos en la zona del Arco Minero del Orinoco, estado Bolívar.
Detalló que pese a que la región se ha militarizado fuertemente, en ese lugar prolifera la minería ilegal de oro y se permite la actividad de grupos armados.
Así mismo, la misión denunció «abusos» contra la población indígena y el enriquecimiento ilícito de personas cercanas a los círculos del poder.
El equipo, que llegó a sus conclusiones en parte con base en casi 250 entrevistas, documentó un total de 122 casos de torturas, violencia sexual y otros tratos crueles, inhumanos o degradantes en la sede del DGCIM en Caracas y en centros de detención clandestinos en otras partes del país.
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