Alexandros Hurdakis es un niño estadounidense de 5 años de edad que fue diagnosticado con ependimoma, un tumor que crece en el cerebro o la médula espinal. Tras unos estudios, los médicos determinaron que su enfermedad es terminal, por lo que sus padres buscaron la forma de hacer realidad uno de los sueños de su hijo: disfrutar de una fiesta de Halloween.
El pequeño ha sido sometido a cirugías, tratamientos de quimioterapia y radiación, pero el tumor se mantiene. Debido a su condición, Alexandros no puede tragar ni hablar correctamente, por lo que respira con un tubo de traqueotomía y come con un tubo de gastrostomía. También usa oxígeno porque tiene apnea del sueño.
Debido a todas estas adversidades, los padres de Alexandros pensaron en cómo cumplir uno de sus mayores deseos, el cual era visitar una atracción embrujada en las Cataratas del Niágara. Sin embargo, los médicos dijeron que no era recomendado viajar con el pequeño, por lo que decidieron hacer que viva una experiencia similar desde su hogar.
“Pensé, ‘OK, traigamos Halloween a Alexandros’”, comentó Tzouanakis Anderson. Con respecto a esta idea, se proyectó el objetivo de crear una «casa embrujada» en el patio del pequeño, fue así que le pidió ayuda a algunas personas mediante un grupo comunitario de Facebook.
Al pasar unas horas, se multiplicaron los comentarios de personas que estaban dispuestas a colaborar. Llegaron muchos mensajes preguntando cómo colaborar para hacer que el sueño de Alexandros se hiciera realidad, y de a poco, esto se convirtió en todo un éxito: la noche del 14 de septiembre pasado, alrededor de 1000 personas se congregaron en la calle de Alexandros para celebrar una fiesta de Halloween con él. Las personas disfrazadas desfilaron por la calle y se acercaron al pequeño para saludarlo y regalarle un momento único y especial.
