Un fuerte terremoto remeció buena parte de Taiwán el domingo y derribó al menos un edificio, que atrapó temporalmente a cuatro personas. Cuatrocientos turistas quedaron bloqueados en una ladera de montaña.
El terremoto de 6,8 fue el más fuerte de las docenas de temblores registrados en la costa sureste de la isla desde el sábado por la mañana, cuando un sismo de 6,4 golpeó la misma zona. En un primer momento no se reportaron heridos graves.
La mayor parte de los daños parecía encontrarse al norte del epicentro, que la Oficina Central de Meteorología de Taiwán situó en la localidad de Chishang, a una profundidad relativamente baja de 7 kilómetros (4 millas).
Un edificio de tres pisos, que tenía una tienda 7-11 en la planta baja y viviendas en las dos superiores se derrumbó en la ciudad cercana de Yulo, según la Agencia Central de Noticias de la isla.
El propietario del edificio, de 70 años, y su esposa fueron rescatados en un principio. Los trabajadores de emergencias lograron llegar después hasta una mujer de 39 años y su hija de cinco años.
Una imagen publicada por el gobierno municipal de Hualien mostraba a la niña tumbada en una manta mientras los rescatistas con uniformes naranjas la trasladaban desde la pila de escombros.
Las imágenes del lugar mostraban los restos de los dos pisos superiores dispersos por el suelo a ambos lados de una calle estrecha, con tendidos eléctricos derribados por el edificio.
Más de 7.000 viviendas estaban sin electricidad en Yuli y había daños en las conducciones de agua.
Policías y bomberos acudieron a un lugar donde se había derrumbado un puente con una carretera de dos carriles en lo que parecía una zona rural de Yuli, y donde uno o más vehículos podrían haber caído, según la Agencia Central de Noticias.
Un deslave atrapó a casi 400 turistas en una montaña de Yuli famosa por las flores naranjas que cubren sus laderas en esta época del año, indicó la Agencia Central de Noticias. No tenían electricidad y la cobertura de celular era débil.
Un tejado en un andén de la estación de Dongli, en la localidad de Fuli, situada entre Yuli y el epicentro del sismo, golpeó un tren y dejó tres de los vagones inclinados, según la agencia, que citó a la operadora ferroviaria.
El sismo se sintió en la capital, Taipéi, situada en el extremo norte de la isla. En la ciudad de Taoyuan, al oeste de Taipéi y 210 kilómetros (130 millas) al norte del epicentro, un hombre resultó herido al derrumbarse el tejado del quinto piso en un recinto deportivo.
Tras el temblor en Taiwán, la Agencia Meteorológica de Japón emitió un aviso de tsunami de para varias islas del sur de Japón, aunque lo levantó más tarde.