El embajador colombiano Armando Benedetti ha colocado a Monómeros en el ojo del huracán político colombo venezolano, al anunciar que existe una propuesta, en su país, para comprar esa empresa sobre la cual existe una medida preventiva de la Oficina de Activos Extranjeros (OFAC) de los Estados Unidos.
Esta empresa, cuya directiva, presidida por Guillermo Rodríguez Laprea, ha sido denunciada como corrupta por la Comisión de Contraloría de la Asamblea Nacional del 2015 ante la Fiscalía General del vecino país, es subsidiaria de Pequiven y en sus dos complejos tiene capacidad, si es recuperada totalmente, de producir 1,3 millones de toneladas de fertilizantes y otros productos para el campo y el sector industrial, que en el pasado llegó a exportar a 50 países.
En declaraciones, al ser entrevistados por separados, para El Impulso, Ismael León, Elías Bessis y Macario González, todos diputados de la Asamblea Nacional del 2015, se refirieron más que a lo dicho por Benedetti, quien fuera jefe de campaña de Gustavo Petro, a los hechos de corrupción y a la importancia que tiene ese activo del Estado venezolano.
Corruptos y sus padrinos
Yo no tengo información de esa propuesta todavía y hay muchas especulaciones, dijo León. Lo primero que se debe hacer es atender la denuncia que se hizo ante la Fiscalía General de Colombia sobre los funcionarios que aparecen en la documentación, acusados de ciertos casos de corrupción.
Mientras eso no se solucione, no se puede hablar de que se va a comprar o vender Monómeros, porque hay que tomar en cuenta que esa empresa está en la mira de los Estados Unidos, del cual tiene una licencia para operar.
Todo lo relacionado con Monómeros tiene complicaciones; pero, ha sido utilizado como un show político, comentó. Lo que hay que tomar en cuenta son los casos de corrupción que han ocurrido en esa empresa.
La Fiscalía de Colombia tiene que investigar la denuncia que hizo el diputado José Luis Pirela.
Ha habido muchas especulaciones y habladurías, prosiguió. Que si mandaron una directiva, que si la aceptaron o no, pero todo han sido zoquetadas. Lo que hay que esperar es que la Fiscalía termine la investigación.
El nombramiento de una directiva por parte de Nicolás Maduro es un show, un espectáculo que no ha debido darse.
Tanto la declaración acerca de la propuesta para comprar Monómeros como la que hizo anteriormente el embajador Benedetti, de que era un craso error que Iván Duque hubiera dado su apoyo a la investigación a los crímenes de lesa humanidad en Venezuela, son irresponsables.
La investigación tiene que dar a conocer lo que hicieron los funcionarios de la empresa y quiénes en Venezuela los apadrinaron y que nunca dieron la cara, manifestó. El informe de la Comisión de Contraloría determinó que Guillermo Rodríguez Laprea tenía que ser destituido y puesto a la orden de la justicia.
Quebrarla y venderla
Cuando analizamos la situación de Monómeros llegamos a la conclusión de que la estaban llevando a un nivel tan alto de corrupción, para quebrarla y venderla a bajo precio, dijo Elías Bessis. La preocupación nuestra, como integrante de la Comisión de Contraloría, es que la empresa es apetecible para quienes están inmersos en el negocio de las drogas porque produce químicos y, en general, los insumos que requieren estos productos ilícitos. Esa era la razón de que la úrea se fabricaba en Venezuela y no en las plantas de Monómeros.
Como se sabe la úrea es un químico indispensable para procesar drogas y consideramos que había la intención de que la empresa tuviera pérdidas de tal manera que llegado un momento pudiera ser comprada muy barata por grupos de narcotraficantes.
En este sentido hay que resaltar que Monómeros era una de las empresas más importantes en América Latina en la producción de agroquímicos, que pudiera caer en manos del narcotráfico. Esa fue la razón por la cual le pusimos la lupa para investigar la corrupción y, desde luego, la intención que habría en quebrarla.
La empresa todavía es rescatable por su amplia capacidad en la producción de agroquímicos para la agricultura, indicó. Y lo que nos llama la atención es que este individuo, Rodríguez Laprea, inmediatamente que ganó Petro se le puso a la orden. ¿Qué está buscando detrás de esa disposición? No lo sabemos. Pero, no podemos dejar de lado que hay señalamientos muy graves de gobiernos sobre Venezuela en el sentido de la pasividad que existe con mafias del narcotráfico.
Embajador imprudente
Macario González es del criterio que el embajador Benedetti se extralimita en sus funciones y hace declaraciones inadecuadas, imprudentes, nada diplomáticas.
Monómeros es una empresa venezolana muy importante, pero que por lamentables manejos extraños de corrupción de Guillermo Rodríguez Laprea ha experimentado una severa situación, motivó que la Comisión de Contraloría, que yo presido, solicitó su destitución.
Mediante la intervención de la Superintendencia de Sociedades de Colombia logró superar algunas dificultades que atravesaba desde el punto de vista de las finanzas, por lo cual sigue siendo una empresa fuerte que cubre el 50 por ciento de los fertilizantes en Colombia y que también puede exportar en la región. Además tiene otras veinte empresas de la industria petroquímica. Recuperando la confianza del mercado puede abaratar los fertilizantes y servir de apoyo en materia agropecuaria a la región.
Al embajador le corresponde facilitar y mejorar las relaciones bilaterales para atender el problema fronterizo en especial de seguridad, tomar en cuenta el tema migratorio y, por supuesto, promover una relación más eficiente entre los sectores productivos de los dos países. De haber existido un movimiento económico que estaba por encima de los 7 millardos en dólares en intercambio comercial, bajó a unos 500 millones de dólares, lo que le indica que su labor tiene que ser muy responsable en ese sentido. Y entender que Monómeros corresponde a los venezolanos, bien por la vía del presidente interino, o por reconocimiento de Petro al régimen de Maduro, y entender que también en ese punto entran los Estados Unidos, ya que sin la licencia de la OFAC no podría operar esa empresa.
Este tema supongo que lo están abordando los Estados Unidos con el presidente Petro y por eso a estas alturas, Maduro no ha podido instalar una lista de nombres como nueva gerencia de Monómeros.
Hasta ahora Petro ha actuado con prudencia porque no creo que quiera tener una empresa convertida en entelequia sin proveedores, ni mercado internacional, totalmente improductiva. Es un asunto que está por encima de lo que pueda pensar el embajador imprudente de Colombia.