Las fuerzas rusas lanzaron este miércoles 24 de agosto un ataque con cohetes contra una estación de trenes en el centro de Ucrania, matando al menos a 15 personas e hiriendo a unas 50, informó el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski.
Esto ocurrió el mismo día en que se cumplen seis meses de la invasión y mientras los ucranianos celebraban también el día que se independizaron de la Unión Soviética en 1991.
El ataque ocurrió en Chaplyne, un pueblo de unos 3.500 habitantes en la región de Dnipropetrovsk, relató el presidente Zelenskyy al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en una videoconferencia, según agencias de noticias ucranianas.
Zelenski había advertido en los últimos días de que los rusos podrían “intentar hacer algo particularmente desagradable, algo particularmente cruel” esta semana.
Los residentes de la capital ucraniana, que en meses recientes ha estado mayormente exentos de ataques, amanecieron el miércoles con el sonar de las sirenas antiaéreas.
Durante el día se reportaron bombardeos rusos contra el este, el sur y el oeste del país, aunque la intensidad no era distinta a la usual.
Lea también: Rusia cañoneó zonas residenciales en el este de Ucrania
Por su parte, el primer ministro británico, Boris Johnson, estuvo en Kyiv, su tercera visita desde el inicio de la guerra, y otros líderes europeos aprovecharon la fecha para declarar su irrestricto apoyo a Ucrania, enfrascada en un conflicto que al principio se perfilaba como una conquista relámpago por parte de Moscú, pero que se ha tornado en una ardua guerra de desgaste.
En tanto, el presidente estadounidense Joe Biden anunció un paquete de ayuda adicional de 2.980 millones de dólares para formar y equipar a las fuerzas ucranianas para el combate en los próximos años.
El mandatario indicó que dichos fondos financiarán contratos para hasta tres tipos de drones y otras armas, municiones y equipos.
“Sé que este día de la independencia es agridulce para muchos ucranianos mientras miles han sido muertos o heridos, millones han quedado desplazados y muchos otros han caído víctima de atrocidades y ataques rusos”, declaró Biden.
“Pero seis meses de ataques implacables solo han endurecido el orgullo de los ucranianos en sí mismos, en su país y en sus 31 años de independencia”, añadió.
En el marco de las celebraciones de independencia, las autoridades prohibieron las grandes concentraciones de personas de aquí hasta el jueves, por temor a que Rusia aproveche la ocasión para lanzar ataques particularmente mortíferos.
“Las provocaciones y ataques brutales de los rusos son una posibilidad”, declaró el presidente Zelenski.
“Por favor, sigan estrictamente las normas de seguridad. Por favor, respeten el toque de queda. Presten atención a las sirenas antiaéreas. Presten atención a los anuncios oficiales. Y recuerden: debemos lograr la victoria todos juntos”.
Aun así, reinaba un ambiente festivo en la Plaza Maidan de Kiev, donde miles de ciudadanos posaron para fotos al lado de restos de tanques rusos que están siendo exhibidos allí. Cantaban los cantantes folclóricos y muchos habitantes —ignorando las sirenas antiaéreas— celebraban en trajes y vestidos tradicionales.
El mandatario ucraniano trató de darle ánimo a la población y expresó: “Hace seis meses, Rusia nos declaró la guerra. El 24 de febrero, toda Ucrania escuchó explosiones y disparos (…) El 24 de febrero nos dijeron: No tienen ninguna posibilidad. El 24 de agosto decimos: ¡Feliz Día de la Independencia, Ucrania!”.
También habló por video ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas —pese a las objeciones de Rusia— y aseveró que “la seguridad del mundo entero” es lo que está en juego de cara a la “agresión demencial” de Moscú.