“El cáncer se puede llevar todas mis habilidades físicas. Pero no puede tocar mi mente, mi corazón y mi alma”, dijo en 1992 el entrenador de baloncesto Jim Valvano, tras ser diagnosticado con un cáncer terminal de huesos.
Esta misma forma de pensar deambuló durante cuatro años en la mente del joven español Carlos Sarriá, mejor conocido como Charlie en Tik Tok, quien en todo ese tiempo luchó contra la misma enfermedad, manteniéndose firme emocionalmente.
Para ser precisos, Charlie tenía un sarcoma de Ewing y había sufrido cuatro recaídas desde que le diagnosticaron la enfermedad a sus 16 años, pero aún así, su humor, energía y positivismo plantaron cara a esta dura lucha y eso lo convirtió en toda una inspiración para miles de personas.
Charlie se definía como «un joven normal, pero con cáncer» o como «el muchacho del cáncer que hace cosas».
Fue durante sus primeros ingresos hospitalarios en 2018 cuando Charlie decidió abrirse una cuenta en TikTok para hablar de su enfermedad de una forma divertida, irónica y sin molestia, algo que lo hizo muy popular en las redes.
En sus vídeos también educaba a sus seguidores con temas relacionados al cáncer, al tiempo que contaba su rutina en el hospital.
Además de esto, Charlie compartía su lado más humano, cómo la relación con su familia y por supuesto, con Nerea, su novia, quien lo acompañó durante todo el proceso, en sus levantamientos y recaídas.
Lastimosamente, el pasado mes de mayo le descubrieron un tumor con metástasis en la coronilla que, finalmente, terminó con su vida el lunes 22 de agosto, con tan solo 20 años.
La noticia ha conmocionado a millones de personas en todo el mundo, quienes han querido dar su gran adiós a Charlie dedicando algunas palabras en la última publicación donde anuncia su muerte, y en el que además se despide agradeciendo a cada persona por hacerlo feliz.
Definitivamente, Charlie ha dejado un importante legado a aquellas personas que se enfrentan a esta dura enfermedad, invitándolos a ser fuertes, transmitir luz y alegría.