Las colas de vehículos que se han formado en las inmediaciones de las estaciones de servicio de Barquisimeto, desde el miércoles de esta semana, se debe a que no ha habido despacho por parte de los gandolas que vienen desde los depósitos de las refinerías de Paraguaná.
Así fue conocida, extraoficialmente, por El Impulso, al consultar a algunos dueños de las estaciones de servicio, quienes dijeron que no tienen una información precisa sobre lo que está ocurriendo, pero en realidad no se ha producido el suministro que esperaban.
Los informantes, quienes prefirieron mantenerse en el anonimato al hablar con los periodistas, manifestaron que la gasolina que se está consumiendo actualmente proviene de la refinería de Cardón.
Se estaba recibiendo hasta hace poco, pero no precisaron fechas, de la refinería de El Palito, en el estado Carabobo, la cual ha dejado de funcionar por estar en proceso de evaluación para efectuar reparaciones.
Aún más, se pudo saber, también extraoficialmente, que debido a la corrosión de los equipos de destilación en esa refinería, la gasolina que se estaba generando contenía elementos corrosivos y, en consecuencia, dañaba los tanques de los vehículos y, por supuesto, afectaba el funcionamiento de esos automotores.
Es por ello que se dejó de refinar el crudo proveniente de Irán, que de acuerdo a los informantes contenía altos grados de acidez por su carga de hidróxido de potasio (kch), a pesar de que su grado de densidad API era un tanto mejor que el venezolano, el cual es de aproximadamente 17 (muy pesado).
Se espera que la situación de la falta de combustible se restablezca este viernes, ya que por lo general el suministro, a través de los cisternas, se viene realizando de un día por medio; es decir, que un día llega y pasado otro, vuelve la gandola.