En vista de la guerra de precios en que está entrando Rusia, debido a las sanciones por haber invadido Ucrania, la situación mundial para Venezuela en el mercado petrolero se está presionando, asegura el economista y experto petrolero, Rafael Quiroz Serrano.
El especialista comentó el tema de la guerra de precios, los problemas de producción venezolanos y hasta las perspectivas de una nueva alianza que podría intentar Nicolás Maduro.
“La relación mutua que se tiene con Irán tiene sus riesgos ya que el mercado mundial se ha vuelto más competitivo por el desplazamiento que está haciendo la oferta rusa de otros crudos en el mercado chino”, señala Quiroz.
Ocurre que los descuentos cada vez mayores que estaría ofreciendo PDVSA obstaculizan el aprovechamiento del actual escenario de precios altos, haciendo, incluso, insostenible la operación de intercambio entre nuestra mezcla y el condensado persa, “calificada, de por si, por algunos analistas como económicamente desventajosa”.
El economista advierte que es posible que esta guerra de precios, que poco a poco va emergiendo por el tipo de competencia feroz planteada por Rusia, “termine convenciendo a Maduro de dar un giro de 180º a su política petrolera y aprovechar las oportunidades que le ofrece el mercado estadounidense mediante señales creíbles de apertura democrática”.
“Irán, ha tenido que aumentar sus descuentos al crudo ofrecido en China, su principal comprador, e igual comportamiento se atribuye a Venezuela, “siendo este último caso, más desventajoso y más acentuado el descuento debido a la mayor calidad del crudo ruso frente a la mezcla venezolana que se coloca en China vía Malasia, hasta el punto de alcanzar un nivel récord”.
Los problemas de producción
Quiroz comentó que la producción petrolera de Venezuela, de acuerdo a fuentes secundarias, cayó en junio por segundo mes consecutivo al quedar en 706 MB/D en junio, frente a 720 MB/D y 721 MB/D en mayo y abril, respectivamente.
Pero agrega que la producción promedio en el segundo trimestre fue superior al primero en unos 40 mil barriles diarios.
Igual subió comparativamente la del primer semestre en 183 mil B/D en comparación con el mismo lapso de 2021.
“La tendencia de recuperación de la producción petrolera desde que tocó su menor nivel de 336 MB/D en 2020 se ha sostenido con ligeros altibajos, y ha podido mantenerse por encima de 600 MB/D desde octubre de 2021 y en vías de estabilizarse sobre 700 MB/D gracias al programa de intercambio de mezcla venezolana por diluyente iraní y el fuerte incremento de los precios petroleros, a los cuales ha podido sacarle mayor provecho de no haberse permitido la caída de la producción de crudos hasta niveles puntuales de 1941”, explica el economista.
Persisten inconvenientes como la calidad del crudo, deficiencias en los mejorados para purgar al crudo de agua y otros componentes; atrasos en los atracadores por labores de mantenimiento en Jose; paralización en las entregas ocasionada por incumplimientos en los pagos de los importadores; corte de energía y hasta la reciente explosión de un gasoducto que afectó el servicio a las instalaciones de mezcla de crudo de PDVSA y al complejo terminal de Jose.
“Constituyen obstáculos que impiden una ruta de mayor sostenibilidad hacia niveles de producción en torno a 800 MB/D, menos aún a los niveles ofrecidos por Nicolás Maduro de 2 MMB/D para finales de diciembre de este año”, sostiene.
Haber soltado el torniquete que tenía EEUU con la prohibición del comercio de Repsol y ENI en Venezuela, produjo que en junio, la petrolera española informó que recibiera 3 MMB, y la italiana 3.6 MMB. Tales entregas han sido de crudo pesado acido.
Quiroz explica que con estas salidas cuantiosas de barriles acopiados, se desocupan espacios para que llegue más crudo mezclado que sale de las unidades mezcladoras que procesan el crudo extrapesado de la Faja con el diluyente iraní, por lo que podría esperarse que la producción petrolera pueda mostrar una ligera recuperación.
Crítica de las expresiones de Diosdado Cabello
La flexibilización estadounidense y la apertura de Maduro con la Ley de Zonas Económicas Especiales, contrasta con las declaraciones de Diosdado Cabello, vicepresidente de PSUV, al señalar que las empresas extranjeras, y especialmente las petroleras, deben pagar por adelantado las compras del petróleo de PDVSA.
“Flaco servicio le presta Diosdado al Régimen Nacional en la campaña para atraer inversiones extranjeras, cuando trata con un vocabulario inapropiado, desconsiderado y hasta un tanto escatológico, a las empresas transnacionales del petróleo que pretenden cobrar las deudas que PDVSA les tiene pendientes, cuando afirma que “se vayan a comer una gandola dulcece”.
Quiroz insiste en que esa no es precisamente esta la mejor forma de incentivar, estimular, atraer y animar al capital petrolero internacional para que vengan a invertir en la industria petrolera, en momentos en que esta pasa por el peor momento de su historia.
Lo que ocurre en Guyana
Advierte sobre estas señales políticas , a las empresas petroleras y que ocurren mientras en Guyana se sigue descubriendo petróleo de medio a ligero y relativamente dulce, y empresas como Exxon, HESS, Tullow Oil, TotalEnergies, Repsol y hasta chinas como Conoco, desembolsan inversiones gigantes con lo cual esperan producir casi 900 MB/D en 2025 y 1.2 MMB/D en 2027.
Quiroz ofrece datos técnicos que advierten sobre un competidor importante siendo nuestro vecino:
“Los precios de equilibrio para explotar el crudo guyanés oscilan entre $35 el Brent en el campo Liza Fase $1, 25 en Liza Fase 2, y $32 para el Proyecto Payara. Precios muy competitivos en comparación con el valor de equilibrio de $40 recientemente estimado por Rystad Energy para nuevas inversiones en la Faja del Orinoco, sin incluir en ese cálculo la sensibilidad por la emisión de C02, mucho menor en el caso del crudo de Guyana”, aseguró