Trabajo de: www.eltiempove.com
Los reclamos por el pago incompleto del acostumbrado bono vacacional y recreacional, mantienen movilizados y en pie de lucha al sector docente del país y otros empleados públicos, desde finales de julio.
En todo el país, el gremio magisterial ha exigido que se le reconozca este beneficio que, según denuncian, fue calculado de forma incorrecta por la Oficina Nacional de Presupuesto (Onapre), tomado como referencia el salario vigente a finales de 2021 (1,60 dólares en aquel entonces) y no el ingreso actual, luego del último ajuste del sueldo mínimo de $30.
Por dos días consecutivos -el 27 y 28 del mes pasado-, profesores y maestros acudieron a las puertas de la sede del Ministerio de Educación en el centro de Caracas, en medio de consignas que reflejaban su malestar. Pero ese fue el comienzo. A partir de esa fecha, las acciones de calle no han cesado.
“En este momento el magisterio y gran parte de los sectores de la administración pública, han accionado el derecho a la protesta para exigir que ese pago ‘chucuto’ se resuelva de inmediato, para que el Estado pueda entregar lo que corresponde de acuerdo a lo contemplado en la convención colectiva y en la Ley Orgánica del Trabajo”, señaló a El Tiempo, Raquel Figueroa, dirigente de la Federación Colegio de Profesores de Venezuela.
El bono vacacional es apenas una parte de los beneficios que han sido burlados por la Onapre, según denuncian los voceros gremiales.
Figueroa aseguro que el Estado ha violado 85 % de los todos los derechos laborales contemplados en los convenios desde hace varios años.
Desde 2016 el magisterio, ha visto la merma de sus derechos. Eso ha traído como consecuencia que el movimiento se organice ahora a nivel nacional. Con el despojo casi total del bono vacacional para el personal activo y recreacional para los jubilados, indudablemente la respuesta de indignación del magisterio se ha manifestado desde el 27 de julio de julio para acá”, agregó Figueroa.
De hecho, las protestas se han intensificado en los últimos días. Este jueves 4 de agosto, centenares de trabajadores de la educación, junto con los del sector salud, empleados de la administración pública, jubilados y pensionados, se movilizaron en distintos estados del país para rechazar el instructivo de la Onapre y reclamar el pago completo del bono vacacional y recreacional.
En Caracas, los manifestantes se concentraron de nuevo frente al Ministerio de Educación, para luego recorrer la avenida Urdaneta y llegar al Ministerio de Educación Universitaria. Las exigencias también se hicieron sentir en las calles de Aragua, Carabobo, Táchira, Lara, Sucre, Monagas y Nueva Esparta.
En perspectiva, la reacción de los trabajadores no es un fenómeno aislado. Según el Observatorio Venezolano de Conflictividad Social (Ovcs) del total de las 3 mil 892 protestas registradas en el país durante el primer semestre de 2022, 1 mil 642 (es decir, 42%), fueron acciones de calle donde se exigían derechos laborales.
Pero aún más. Al reclamo de los educadores se han unido voces de distintas corrientes políticas. Un escenario que parecía ajeno el aletargado y atomizado movimiento laboral años atrás.
La Onapre: detonante del conflicto
Las protestas laborales de enero a junio de 2022 también evidencian un incremento en comparación con el mismo período de 2021.
Durante el primer semestre del año pasado, el Ovcs contabilizó 1 mil 177 actividades de reclamo por derechos incumplidos en el sector trabajo. La cifra representaba 34,68% del total de 3 mil 393 manifestaciones de calle que se registraron en el país en ese período.
Así, las cifras de protestas laborales de los primeros seis meses de este año fueron 7,32% más altas que las reportadas en 2021.
El Ovcs apunta varias razones para que esto haya sido así.
Una de ellas es la pérdida del poder adquisitivo del ajuste salarial de Bs 130 decretado el 15 de marzo de 2022 plasmado en la Gaceta Oficial Extraordinaria N° 6.691. En aquel entonces, el incremento equivalía a 30 dólares, según la tasa de cambio del Banco Central de Venezuela (BCV), (Bs 4,29 por dólar). No obstante, con la depreciación que ha experimentado la moneda nacional -la tasa oficial se encuentra ahora en Bs 5,79 por dólar y la paralela en Bs 6,02-, el salario básico ya representa entre $22,72 y $ 21,59, haciendo que a los trabajadores les resulte cada vez más cuesta arriba cubrir sus necesidades.
El segundo, y más importante factor, que ha llevado al incremento de las protestas específicamente en el segundo trimestre, es el aplanamiento de todas las tablas salariales y contratos colectivos establecidos unidireccionalmente por el llamado instructivo Onapre.
“Los sectores que hacen vida en la administración pública reclamaron la eliminación de muchos de sus beneficios, disminución o eliminación de primas hasta en 60%; desconocimiento de primas de antigüedad; aplanando las tablas sin importar los años de servicio, promociones y meritocracia de los trabajadores. Como respuesta a estas protestas, los trabajadores han recibido por parte de las instituciones de Gobierno jubilaciones forzosas y despidos injustificados y también amenazas, detenciones arbitrarias y persecuciones”, apuntó en su informe semestral el Ovcs.
Otro aspecto a destacar ha sido el hecho de que los reclamos laborales ocupan el primer lugar en la lista de protestas, en relación con años anteriores, cuando el escenario de manifestaciones parecía dominado por el tema político.
En 2019 -antes de la pandemia de COVID que llevó a una irremediable disminución de las acciones de calle-, se llegaron a contabilizar 10 mil 477 protestas. De ese total, las manifestaciones por derechos laborales ocuparon el tercer lugar -1 mil 587 protestas (15, 14%). Mientras, las actividades en defensa de los derechos a la participación política y por los derechos a la vivienda y servicios básicos, ocuparon un holgado primer y segundo lugar respectivamente, con 4 mil 777 (45,59%) y 4 mil 169 protestas (39,79%).
El lastre del paralelismo sindical
Actualmente, a los educadores se han sumado otros sectores con exigencias similares, como el de la salud, pero también los reclamos han servido para unificar las voces sindicales y gremiales de corrientes distintas, incluyendo del chavismo, la oposición y sectores críticos al Gobierno.
Froilán Barrios, secretario Ejecutivo de la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV) e integrante de Frente Autónomo en Defensa del Empleo, Salario y Sindicato (Fadess), subraya que los atropellos y violaciones a las conquistas laborales han sido tan graves, que ni siquiera las centrales chavista han podido frenar los reclamos o las recientes protestas.
“No lo han podido hacer porque la decisión de los trabajadores ha tenido mayor peso. Los trabajadores protestan porque el hambre no deja otra opción que no sea salir a la calle. Tanto es así, que la Central Unitaria de Trabajadores de Venezuela (Cutv) vinculada al Partido Comunista ahora está protestando contra el mismo Gobierno y varios de sus dirigentes están presos en este momento”, indicó Barrios a El Tiempo.
Las coincidencias entre una gran cantidad de voceros gremiales ha marcado la diferencia en esta oportunidad. En los últimos 20 años el sindicalismo venezolano ha atravesado por distintas fases que han debilitado de manera significativa su capacidad de acción al momento de defender las conquistas laborales. Una de las principales etapas ha sido la proliferación de organizaciones paralelas, que ha sido contraproducente al momento de discutir convenios y defender las reivindicaciones.
En la década de los 80, se llegaron a contabilizar aproximadamente entre unos 2 mil 800 a 3 mil sindicatos en Venezuela. En el año 2001 cuando se realizaron las elecciones supervisadas por el CNE, se registró un número de 2 mil 100 sindicatos.
“En aquel momento existían cuatro centrales. La CTV, la Cutv, Codesa y CGT. Eso se multiplicó. ¿Por qué? Porque el Gobierno, después del paro nacional del 2002-2003, trazó una política de el paralelismo sindical y crearon nuevas centrales de corte oficialista. Donde antes había un sindicato, ahora hay tres. A partir de allí, el Ministerio del Trabajo dejó de emitir informes sobre cuántas organizaciones existían (…) Se habla de que en la actualidad hay unos 6 mil sindicatos, producto del paralelismo sindical”.
Encuentro unificado
En las últimas semanas, parece existir una tendencia a la unificación de voces y tendencias gremiales. En el contexto de las recientes exigencias laborales, dirigentes de la organización Espacio Sindical Unitario convocaron a un encuentro nacional de trabajadores el pasado 30 de julio en Caracas, con el objetivo de apoyar la solicitud de reivindicaciones todo el territorio nacional.
“A este encuentro acudieron aproximadamente 160 a 170 dirigentes sindicales de diferentes factores que dejan entrever que la conflictividad va a continuar. ¿Por qué? Porque los trabajadores en Venezuela no les queda otra. Porque saben que aceptar esa política gubernamental contra los derechos sindicales atenta contra sus condiciones de vida”, agregó Barrios.
Entre los planteamientos realizados durante el encuentro destacaron la lucha por la aprobación de la ley de escala móvil de salarios y pensiones, indexados a la canasta básica, y la ley de rescate y revalorización de las prestaciones sociales. Asimismo, se aprobó realizar una jornada de movilización nacional.
En la actividad participaron corrientes, organizaciones sindicales y movimientos de diferentes orientaciones y matices como la Coalición Sindical, Unete, sectores de la CTV, ASI y Codesa, Fenasoesv, Sinatraucv; así como Ccura, Marea Socialista, LTS, Lucha de Clases, UST y Fadess, entre otros.
Este intento de integración de propuestas en medio de la heterogeneidad es incipiente y no significa de entrada que se esté operando un cambio firme luego de dos décadas en que la proliferación de organizaciones paralelas, la falta de autonomía y la criminalización de la protesta, causaron estragos en la lucha laboral. Sin embargo, los voceros consultados no dudan en señalar que se trata de un primer paso importante que podría resultar auspicioso en el marco de la intensificación de las acciones que reclama el sector.
Para más información: www.eltiempove.com