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Manuel Cristopher Figuera, quien era director del Sebin cuando el atentado con dron, señaló a la «primera combatiente» de ordenar que a inocentes los procesaran. Denunció que se violó el Código Orgánico Procesal Penal (COPP) y que Maduro sabía que algo se estaba fraguando en su contra antes del evento, pero que él mismo pidió que se hiciera el desfile de la Guardia Nacional en un lugar distinto a Fuerte Tiuna
El exdirector del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), Manuel Cristopher Figuera, ratificó el jueves 4 de agosto que hay personas inocentes que fueron sentenciadas por el caso del «intento de magnicidio» contra el mandatario, Nicolás Maduro, como por ejemplo los generales Pérez Gámez, Hernández Da Costa, Juan Requesens y la joven Emirlendris Benítez.
En entrevista concedida a EVTV Miami, Cristopher Figuera aseguró que tanto Maduro como la primera dama, Cilia Flores; el ministro de la Defensa, Vladimir Padrino López, y el director de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim), Iván Hernández Dala, sabían de las irregularidades del caso porque el director del Sebin lo comunicó en una reunión donde ellos estaban presentes.
Expresó que en dicho encuentro Flores, a pesar de ya saber que habían personas inocentes, dijo «mala suerte» y que siguiera el proceso judicial contra todas las personas presuntamente vinculadas al caso.
Al parecer, Saab le dijo que si bien le llegaba la orden de traslados, él no debía ejecutarla. Sin embargo, respondió que él cumplía con lo que le ordenaban a hacer. Luego dijo haberlo encarado y manifestado que si quería que se hiciera cargo de las «irresponsabilidades» de la Fiscalía.
Comentó que hizo una investigación paralela porque consideraba que las evidencias eran inconsistentes. Incluso, mencionó que en la reunión donde estaba Cilia Flores denunció que esto estaba ocurriendo y que era necesario poner en libertad a quienes no estuvieran inmiscuidos en el problema.
Ante esa situación, Manuel Cristopher Figuera mencionó que optó por mejorarle la situación a los privados de libertad.
El exdirector del Sebin reprochó que en el proceso se hayan dado violaciones al Código Orgánico Procesal Penal (COPP) por llevar a cabo las audiencias en horas de la noche, ya que en el mismo articulado están establecidas las horas de trabajo de los tribunales.
Sí aseveró que los drones empleados el 4 de agosto de 2018 tenían cierto riesgo y afirmó haberle confesado a Maduro que desde el Sebin se sabía de ese intento de magnicidio. «Yo también tengo esa información», le respondió el mandatario y le recalcó que «por eso es que estás allí» en el Sebin.
Rememoró que en el caso del general Pérez Gámez, el sentenciado a 30 años lloró durante la entrevista que sostuvo con él en ese momento y reveló que el alto oficial había pensado en quitarse la vida porque sentía que Padrino López, a quien consideraba su amigo, lo abandonó y dejó que lo metieran preso sin razón.
Comentó que fue Maduro el que pidió ese año hacer el desfile en un lugar distinto a Fuerte Tiuna y fue el entonces comandante de la Guardia Nacional, Richard López Vargas, junto a Padrino López, los que decidieron que sería en la avenida Bolívar de Caracas. Refirió que acusan a Pérez Gámez por supuestamente revelar información «secreta» sobre el desfile, cuando lo que hizo fue dar la orden de operaciones y supervisar las maniobras.
En torno al general Hernández Da Costa, Manuel Cristopher Figuera dijo que el hoy general sentenciado a 30 años era envidiado por su brillantez e integridad. En ese sentido, comentó que Alexander Gramcko, de la Dgcim, hizo una especie de «análisis» e hizo una lista de sospechosos en el caso e incluyó a varios altos oficiales.
Aseveró que desde la administración de Maduro saben que él entregó información a la comisión que elaboró el Informe de Verificación de Hechos de la ONU sobre varios casos, entre ellos el de Roberto Marrero, y que le han llegado poco a poco información de gente que aún está dentro porque manifiestan preocupación por el tema de la no prescripción de delitos de lesa humanidad.
Destacó también que habían personas, como el primer vicepresidente del PSUV, Diosdado Cabello, que sabían lo que iba a ocurrir y que no se presentaron al desfile. Además, denunció que la orden de captura contra Carla Angola se hizo solo para evitar que la gente hablara sobre las sentencias del caso del «intento de magnicidio».
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