3 muertos y 6 heridos dejó un ataque a una guardería en el sur de China, indicó la policía, al tiempo que señaló se mantiene en la búsqueda del responsable.
El sospechoso de 48 años fue identificado por su apellido, Liu, en un breve comunicado policial. No se dieron más detalles del ataque registrado el miércoles por la mañana en el condado de Anfu, en la provincia sureña de Jiangxi.
China aumentó la seguridad en las escuelas tras una serie de ataques mortales en los últimos años atribuidos principalmente a personas resentidas con la sociedad o que sufrían enfermedades mentales no identificadas.
El país asiático no permite la posesión privada de armas, de modo que la mayoría de esos ataques se hacen con arma blanca, explosivos caseros o bombas de gasolina. Unos 100 niños y adultos murieron y cientos resultaron heridos durante la última década en ataques individuales y sin coordinación aparentes. Los agresores, con motivaciones poco claras y casi siempre varones, fueron abatidos, se suicidaron o fueron juzgados y más tarde ejecutados.
La violencia contra los niños en China es especialmente impactante debido a la baja tasa de natalidad del país, debido en parte a décadas de medidas de control de población.