Equipos de búsqueda y rescate apoyados por la Guardia Nacional de Estados Unidos buscaban el viernes a personas desaparecidas en inundaciones récord que han arrasado con comunidades en algunos de los lugares más pobres del país. El gobernador de Kentucky, Andy Beshear, dijo que 16 personas han muerto y que se teme que el total aumente, ya que continúan los aguaceros.
“Nos queda mucho por revisar”, afirmó Jerry Stacy, director de manejo de emergencias del condado de Perry, en Kentucky, una de las áreas más afectadas. “Aún hay personas desaparecidas”.
Las poderosas inundaciones sepultaron comunidades aledañas a arroyos y ríos en los valles de los Apalaches, inundando viviendas y negocios, destruyendo vehículos y lanzando equipo y escombros contra puentes. Las avalanchas de lodo vararon a residentes en laderas empinadas y al menos 33.000 usuarios estaban sin electricidad.
El gobernador Beshear dijo el viernes a The Associated Press que entre las víctimas había niños y que el saldo de muertes pudiera aumentar al doble, pues los equipos de rescate aún estaban revisando el área.
“La noticia dolorosa es que hay 16 muertes confirmadas ahora y eso va a subir mucho”, declaró el gobernador en un encuentro con la prensa por la mañana. Dijo que las muertes ocurrieron en cuatro condados.