Serios estragos que pusieron en evidencia la vulnerabilidad del sistema eléctrico de la zona norte de la entidad, como consecuencia de los vientos huracanados azotaron a Barcelona, capital del estado Anzoátegui, aun cuando no llegaron a alcanzar la categoría de huracán que se había anunciado.
Así lo dio a conocer el diputado del Consejo Legislativo Regional, Richard Casanova, para quien la gobernación es la única responsable de la tragedia que significó para muchas personas vivir sin electricidad por varios días en Barcelona y su periferia.
A su parecer, es evidente que el ejecutivo regional no tenía ningún plan de contingencia por la forma como enfrentó la situación.
Esta situación generó un gran impacto en el servicio eléctrico en sectores tales como Los Boyacá y Barrio Sucre, que estuvieron sin luz durante tres días; y aún se mantiene de forma intermitente en zonas como el casco central, el Parcelamiento Puente Ayala y alrededores de la zona sur barcelonesa.
Solidario con trabajadores de Corpoelec
Por otra parte, Casanova –quien también es arquitecto de profesión y miembro del Colegio de Ingenieros de Venezuela–, manifestó su total solidaridad con los trabajadores de Corpoelec, quienes hacen grandes esfuerzos para reparar los daños, a pesar de no contar con equipos, material y personal capacitado. “Unos porque se han ido del país y otros porque han renunciado”, apuntó.
No obstante, igual destacó la ausencia de planes e inversiones para mejorar el Sistema Eléctrico Nacional.
Casanova insistió en que «es imperativo tener previsión y mantenimiento efectivo para este tipo de contingencias. Pero la Gobernación prefiere ocupar su tiempo en pintar paredes bonitas».