No conocemos que alguna luz, por eso de no conocerla, tenga movimiento. Pero esa luz no sería la que comúnmente todos conocemos. De todas maneras, si existe alguna luz que se mueva, me gustaría conocerla para desmentirme. Lo que sucede y de esto ya estamos enterados; se trata de la iluminación de los días que se produce en la atmósfera. El proceso a grosso modo es como sigue: el Sol difunde energía no propaga luz como comúnmente se cree. La energía es muy veloz. En una crónica anterior expusimos la velocidad de la energía. La energía propagada por el Sol invierte un poco más de 8 minutos en cubrir la distancia que media entre el Sol y la Tierra que son aproximadamente ciento cincuenta millones de kilómetros. Lo que llega del Sol a la atmósfera de la Tierra no es luz, ya lo dijimos, la luz es puntual, lo que llega es energía solar. Como la energía eléctrica que llega al bombillo para iluminarlo. Esa energía solar es la que ilumina las partículas transparentes y gaseosas que constituyen la atmósfera. Es de este modo como se iluminan los días de la Tierra.
Como la luz no se mueve, en la ecuación energía es igual a la masa por la velocidad de la luz al cuadrado. (E=m.c2). Hay un error en la ecuación. Entonces la ecuación debiera ser: energía es igual a la masa por la velocidad de la energía al cuadrado (E=m.e2) Se confirma así, con la segunda ecuación corregida, que la luz no se mueve, se mueve la energía. De modo que es falsa la velocidad de la luz. La luz es un efecto de la energía eléctrica en la masa del filamento del bombillo; y es un efecto de la energía solar en las partículas gaseosas de la atmósfera. Se confirma con estos ejemplos, que lo que se mueve es la energía eléctrica y la energía solar. El movimiento de la energía es imperceptible a la visión. La luz es puntual en el bombillo y puntual en la atmósfera. Se mueve la energía eléctrica conducida por cables y la energía solar que ilumina las partículas de la atmósfera de la Tierra.
Carlos Mujica
