Este jueves 16 de junio, el Estado de Israel manifestó su preocupación por el avión iraní-venezolano que aterrizó el pasado 6 de junio en Ezeiza, Argentina, y actualmente se encuentra retenido mientras es investigado.
«Esta aeronave, que hasta hace poco tiempo era utilizada por la empresa iraní Mahan Air, aterrizó en Argentina llevando a bordo a un grupo de funcionarios iraníes, entre los que se encontraba un alto ejecutivo de la empresa aérea persa Qeshm Fars Air«, señaló la Embajada israelí en Argentina.
Señalan que el país está “particularmente preocupado” por la actividad de las compañías aéreas iraníes Mahan Air y Qeshm Fars Air en América Latina, empresas que se dedican “al tráfico de armamento y al traslado de personas y equipos que operan para la Fuerza Quds, las cuales están sancionadas por Estados Unidos por estar involucradas en actividades terroristas”.
“Los hechos recientes dan cuenta de los intentos sostenidos de la República Islámica de Irán, a través de la Guardia Revolucionaria y la Fuerza Quds, para continuar consolidando su influencia en todo el mundo, incluso en Sudamérica, como base para acciones terroristas en el continente», explican.
El domingo pasado, la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) y la Delegación de Asociaciones Israelitas en la Argentina (DAIA) le exigieron al Gobierno de Argentina que esclarezca la retención del Boeing 747 y pidieron una investigación «exhaustiva y detallada» sobre los tripulantes.