En un sencillo pero muy emotivo acto, la Fundación Amigos del Casco Histórico de Barquisimeto rindió homenaje a los generales Eladio y Jacinto Fabricio Lara, hijos del héroe epónimo, general José Jacinto Lara en ocasión de celebrarse los 244 años de su nacimiento este 28 de mayo. La actividad se realizó en el Panteón de la familia Lara, ubicado en el cementerio Bella Vista de esta ciudad.
Asistieron al acto la directora de la referida fundación, profesora Yutita de Chiossonne, el presidente Raúl Azparren y el doctor Jorge Ramos Guerra, exgobernador del estado Lara y quién intervino como orador de orden en esta oportunidad, entre otros importantes miembros de la Fundación Amigos del Casco Histórico de Barquisimeto.
Durante su intervención, el doctor Jorge Ramos Guerra resaltó la importancia de los vástagos del general Lara, Eladio y Jacinto Fabricio, ambos excelentes ciudadanos, cuyas primeras luces las vieron en el Colegio Federal de Barquisimeto.
Los hermanos Lara se van luego a Caracas a cursar estudios superiores y allí conocen a Antonio Guzmán Blanco, con quien entablan buena amistad y ello conllevaría a la ocupación de importantes cargos al llegar el Ilustre Americano a la presidencia de la República.
Jacinto Fabricio Lara, quien al igual que su hermano Eladio llegó al rango de general, fue presidente o gobernador del estado Lara en tres oportunidades y además ocupó importantes cargos durante la gestión de Guzmán Blanco, entre estos ministro de Marina y Guerra, ministro de Exterior, senador y canciller de la República, entre otros.
«Los hermanos Lara tenían desde los 20 años conciencia de la importancia de su padre en la conquista de la independencia venezolana, ellos sabían de primera voz de su lucha junto al Libertador Simón Bolívar y otros grandes héroes de aquella importante gesta», relató el orador de orden, doctor Jorge Ramos Guerra.
Jacinto Fabricio Lara podría decirse es el precursor de la modernización de Barquisimeto en la segunda mitad del siglo XIX, con obras como el mercado municipal, el cuartel militar, construcción de importantes carreteras, escuelas e inicios del proyecto del ferrocarril que unió a la capital larense con el puerto de Tucacas.
Resaltó el orador de orden la importancia de este tipo de actos, no para honrar la memoria de aquellos que ya no están entre nosotros, sino para motivar a las nuevas generaciones a seguir tales ejemplos con obras y acciones que contribuyan al bienestar colectivo.
Es de hacer notar que el sepulcro dónde reposan los restos de los hijos del general Jacinto Lara se encuentra descuidado y lleno de monte, situación que entristece por cuanto ese espacio debería de gozar de más atención debido a su importancia y relevancia histórica.
Acompañaron durante el acto a la profesora Yuyita de Chiossonne, Raúl Azparren y al orador de orden, Jorge Ramos Guerra: Guillermo Meléndez, Oswaldo Silva, Félix Travieso, Nelson Fréitez, Armando Arrieta, Luisana Zavarce, Rafael Ignacio Montes de Oca, José Alberto Reyes y Carlos Guerra.