En Lara hay, en estos momentos, 1100 pacientes renales, de los cuales 250 requieren de intervenciones quirúrgicas para recibir nuevos riñones.
Sin embargo, aún no se sabe cuando esas operaciones serán reanudadas, ya que fueron suspendidas desde hace ocho años, declaró el exdiputado larense Daniel Colmenares.
El presidente de la Fundación de Pacientes Renales, en declaraciones a Elimpulso.com, dijo que de los 250 que requieren de trasplantes 80 tienen todos sus exámenes completos para ser intervenidos. Y el resto se los está haciendo.
Aún más, hay 25 donantes familiares del grupo de los ochenta, quienes tienen esperanzas de que el Nicolás Maduro tome en cuenta la situación por la cual están atravesando estos enfermos.
De acuerdo con las cifras que tiene la Fundación, dijo Colmenares, en Venezuela hay 23 mil pacientes renales.
Conviene subrayar que el tratamiento de estos enfermos es costoso, ya que por lo general oscila entre 500 y 600 dólares, que es un monto muy difícil para adquirirlos por parte de los familiares.
Esos medicamentos eran suministrados por el Instituto Venezolano de los Seguros Sociales, pero igualmente se suspendió ese beneficio, manifestó Colmenares.
Considera que es contradictorio que el problema renal sea atendido por el Ministerio del Trabajo, a través del IVSS, cuando se trata de una atención que debe ser responsabilidad del Ministerio de la Salud.
No existe explicación alguna por la cual la administración de Maduro se ha desentendido de los pacientes renales, ya que la Constitución lo obliga a prestar servicio a los ciudadanos enfermos.
Y lo más crítico son los trasplantes, porque mediante éstos se les garantiza la vida a las personas que sufren enfermedades renales, comentó Colmenares, quien precisó que durante el proceso de intervenciones se habían beneficiado 64 personas, que fueron atendidas en el Hospital Central Universitario Antonio María Pineda.