La gratitud y el agradecimiento deben ser eternos porque cuando se quiere se puede, pero como dicen y está comprobado más del noventa (90) por ciento de los coterráneos están en la pobreza sobre todo buenos profesionales, como es el caso de los trabajadores de la Educación, honorables profesores hoy están viviendo una vida muy limitada, llenos de carencias por supuesto son muchos y le debemos gratitud por haber sido abnegados ciudadanos, dedicados a enseñar nuestros hijos y nietos, con una brillante y notable responsabilidad, aportando lo mejor para una buena enseñanza y como recompensa solo la ingratitud que agobia y desestimula a quien se ha portado bien y ha hecho el aporte más noble y sagrado que se requiere el ser humano que es la educación, sabemos que una población sin instrucción y desnutrida es improductiva, entonces esos educadores y jubilados víctimas del desprecio y la ingratitud no tienen razón de estar agradecidos ya que sentirán que araron en el mar, su aporte bien positivo se lo llevo el viento, es triste ver a este gremio y los demás jubilados después de trabajar y aportar toda la vida siendo esta nación como todos lo sabemos la más rica del planeta, Dios a donde se fue o se evaporo tanta riqueza?
La verdad hoy no me sale nada positivo que es lo que a mí me gusta narrar además es mi forma de ser y vivir por ser esto muy bueno para la salud sobre todo cuando se decide ser atropellado por el Espíritu Santo, alimentar mi mente y espíritu, admirar y amar, darle preferencia a la paz y no a la razón, no confrontaciones, si no aportes en positivo que si no benefician a nadie tampoco lo perjudican, pero siempre hay que aportar hasta donde duela y trabajar hasta el cansancio, solo el trabajar honesto es el que da resultados por pocos que sean.
Es para confundirse si quienes nos dirigen parecen ser tan confundidos que de repente hay un signo de recuperación y de repente punto y seguido viene una ley que mata toda ilusión y nublan las esperanzas, corta las aspiraciones porque parece un problema sin solución o son master en complicar las cosas o campeones del conflicto, aun conociendo que todos desean aportar y apostar a una salida favorable que a todos beneficien y podamos todos vivir en paz y bien alimentados, que sean eliminados todos esos números del alto porcentaje de desnutrición, los infantes y los viejos muriendo de mendigar, todos en convivencia consciente de que la violencia es la comadrona de todo sociedad vieja, que lleva en sus entrañas otra nueva
Ahora más que nunca el campo es la solución, unidos todos por la paz, la convivencia, el respeto y la prosperidad de nuestro país.
José Gerardo Mendoza Duran