El pasado 04 de mayo la embarcación Santo Amaro II zarpó desde el muelle Las Piedras, ubicado en la ciudad Punto Fijo, estado Falcón, con cinco tripulantes que irían a cumplir la faena de pesca y desde entonces están desaparecidos.
Ante la falta de respuesta de la búsqueda que «presuntamente» realizan Guardacostas, los familiares de los desaparecidos en compañía de allegados se apostaron en las instalaciones del muelle para exigir evidencias del rastreo, ya que al parecer culminó la búsqueda vía aérea.
La hija del capitán del barco, Rubimar Vargas dijo que el armador, Carlos Estaba les aseguró haber iniciado la búsqueda por sus propios medios al cuarto día de no tener comunicación. «Debió reportar la desaparición desde el principio y notificar a los familiares», expresó.
Agregó que cada vez que le piden una explicación al propietario de la nave marina, el señor Estaba responde con groserías, amedrentamiento y les asegura que los marinos secuestraron el barco. «Si está tan seguro que robaron su barco por qué no coloca la denuncia», rechazó Vargas.
Por su parte, la señora Norelys Gotopo denunció que así como el propietario de la embarcación piensa mal, al decir que le robaron su barco, entonces ellos como familiares también les parece sospechoso que él no haya enviado a su personal de confianza en esta bordada.
La esposa de otro de los desaparecidos, informó que la última vez que tuvo comunicación fue a la 6 de la tarde del día en que zarpó el barco. «Es primera vez que pasa esto, nunca tardan más de 10 días y van 2 semanas. Exijo que el dueño de la embarcación nos dé la cara», manifestó.
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