En el informe anual del Observatorio Venezolano de Centros Penitenciarios presentado este 10 de mayo se desprendió que el estado Lara es la entidad venezolana con mayor número de reclusos fallecidos con un total de 33 muertos, seguido de Anzoátegui con 27 y Monagas con 16 reos muertos. Estas cifras corresponden al año 2021.
Así lo informó en rueda de prensa la doctora Carolina Girón, vocera del Observatorio Venezolano de Prisiones, quien señaló que en el caso de la entidad larense el 64% de los decesos se produjeron por problemas de salud debido a las pésimas condiciones de los recintos penitenciarios. El hambre y la desnutrición serían otros causales del deterioro físico de los privados de libertad.
«En el estado Lara hay dos penitenciarías y estas son Fénix y Uribana y entre esos dos centros la población es de aproximadamente 5000 presos que viven en condiciones de hacinamiento y además no cuentan con un servicio de atención médica que les brinde ningún tipo de tratamiento cuando lo requieran», señaló la vocera.
Al ser consultada sobre las posibles causas que elevan a las penitenciarías larenses con el mayor número de reclusos fallecidos, explicó que en estos reclusorios hay personas de estados lejanos que no cuentan con la ayuda de familiares o allegados que les lleven alimentos a la cárcel «y por ellos están condenados a pasar hambre y hasta morir«.
Pero esta situación no es exclusiva del estado Lara. Según el informe presentado, que abarca el año 2021, durante este período fallecieron 126 reclusos en el país, de los cuales 48 fallecieron por problemas de salud. «En Venezuela el hambre y la enfermedad matan más que la violencia en las cárceles», apuntó la vocera.
En otras cifras, se pudo conocer que para diciembre de 2021 la población en los centros penitenciarios de Venezuela era de 33.710 reclusos y se coloca en un 47% por encima de su capacidad. «La capacidad en nuestro país es de 21000 presos y en los actuales momentos tenemos 33 personas tras las rejas», indicó la doctora Girón.
En este sentido, señaló que un 54% de esa población está bajo proceso judicial. «El retraso procesal es una de las principales causas de hacinamiento en nuestras cárceles y en 2021 se ubicó en un 41%», precisó la vocera del Observatorio Venezolano de Prisiones.
Este retraso procesal es consecuencia de la desidia del Poder Judicial presente en el retraso o no entrega de las boletas de excarcelación cuando culmina la pena, personas con boleta de excarcelación a las cuales no se les permite salir de la cárcel y otros tópicos como la falta de independencia judicial, corrupción, etc.
En diciembre de 2021 habían 35000 presos en las cárceles y otros 35000 en los calabozos y la capacidad es de 20000 reclusos, «las matemáticas no engañan», dijo la doctora Girón.
En cuanto a las condiciones de salud en los centros penitenciarios del país, refirió la vocera del Observatorio Venezolano de Prisiones que tal y como se indicó antes con el caso del estado Lara, en Venezuela se le niega atención médica a los privados de libertad.
«En nuestras cárceles tenemos severos casos de desnutrición y muchos de los presos apenas si alcanzan los 45 kilos de peso«, indicó la doctora Carolina Girón. La tuberculosis también causa estragos en los reclusorios y en este sentido, dijo que en las cárceles se supone deberían haber protocolos para el tratamiento de esa enfermedad, pero no lo hay.
En síntesis y ante todo lo antes expuesto, de este informe de la situación penitenciaria en Venezuela durante el año 2021 se desprende que ya la violencia pasó a un segundo plano como causa de muertes en nuestras cárceles, ya que el hambre y las enfermedades son las primeras causas.