Ante el colapso de la red cloacal de Barquisimeto, uno de los grandes riesgos que corren los habitantes es la contaminación por aguas cloacales, ya que según refiere el ingeniero Sergio Borgel, el 50% de lo que corre por las calles luego de las precipitaciones es el fluido de las cañerías que se mezcla con la red drenajes, situación que puede generar un grave problema sanitario.
En este sentido, reiteró Borgel que como lo ha referido en anteriores oportunidades, el 70% de la red de cloacas está colapsado y más aún, en muchos casos las tuberías de aguas negras han sido conectadas a la red de drenajes que recoge las aguas de las lluvias.
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Tanto las aguas negras como las aguas pluviales disponen de redes diferentes para su conducción, son diseños diferentes y por tanto las mismas no deben ni pueden conectarse, pero en nuestra ciudad la realidad es otra, ya que en muchos casos se desvían los desperdicios líquidos de las cañerías a la red de drenajes y ahí está el problema.
Explicó el ingeniero Borgel, que es por ello que cada vez que cae un palo de agua muchas de las llamadas bocas de visita colapsan y peor aún, las aguas negras brotan y corren libremente por las calles y cuando hay inundaciones la gente camina sobre ríos contaminados de cloaca.
El problema está latente tanto en el oeste (Dren X) Norte (quebrada Guardagallo) y este de Barquisimeto (urbanización Fundalara). Esos afluentes estarían recibiendo importantes descargas de aguas cloacales y por ello es que en la mayoría de los casos hay malos olores todo el tiempo.
En todo caso, Borgel apuntó que en Barquisimeto lo que se necesita con urgencia es un plan rector de drenajes a través del cual se actualicen las redes distribuidoras de aguas cloacales y aguas pluviales, a fin de acabar con el padecimiento que sufre la ciudad cada vez que llega la temporada de lluvias.
