Elon Musk llegó a un acuerdo para comprar Twitter por aproximadamente 44 mil millones de dólares el lunes, prometiendo un toque más indulgente para vigilar el contenido en la plataforma donde promueve sus intereses, ataca a los críticos y opina sobre temas sociales y económicos a más de 83 millones de seguidores.
El extrovertido CEO de Tesla, que también es la persona más rica del mundo, dijo que quería comprar y privatizar Twitter porque cree que no está aprovechando su potencial como plataforma para la libertad de expresión.
Musk dijo en un comunicado conjunto con Twitter que quiere que el servicio sea «mejor que nunca» con nuevas características, como deshacerse de los «bots de spam» automatizados y hacer que sus algoritmos estén abiertos al público para aumentar la confianza.
“La libertad de expresión es la base de una democracia que funcione, y Twitter es la plaza pública digital donde se debaten asuntos vitales para el futuro de la humanidad”, dijo.
El acuerdo se consolidó aproximadamente dos semanas después de que el multimillonario revelara por primera vez una participación del 9 por ciento en la plataforma. Musk dijo la semana pasada que había obtenido 46.500 millones de dólares en financiación para comprar Twitter, presionando al directorio de la empresa para que negociara un acuerdo.