La directora en funciones de la División de las Américas de Human Rights Watch (HRW), Tamara Taraciuk, afirmó que las sanciones individuales sobre la administración de Maduro «son indispensables» para «frenar las violaciones de DDHH» en Venezuela.
En entrevista con El Nacional, señaló que el país «es uno de los ejemplos más extremos de los graves desafíos que en décadas ha enfrentado la región».
De igual forma, expresó su preocupación por las «tres crisis» que viven los venezolanos. «La arremetida del chavismo contra la oposición, la emergencia humanitaria y el éxodo de más de seis millones de ciudadanos», indicó.
En este sentido, advirtió que la intención de cooperación de las autoridades venezolanas con el escrutinio internacional no es genuina, recordando que a los expertos de la Misión de Determinación de los Hechos sobre Venezuela, creada por el Consejo de Derechos Humanos en Ginebra, «nunca les permitieron investigar en el terreno».
Por último, hizo un llamado a la comunidad internacional a seguir presionando a la administración de Maduro «para obligarlo a sentarse en la mesa de negociación», para de esta manera «lograr acuerdos tangibles que permitan restablecer el Estado de Derecho y el ejercicio de los derechos fundamentales en Venezuela».