La ONG Monitor Salud, presentó los resultados de su más reciente informe sobre la crisis generalizada que afrontan los trabajadores de la salud en Venezuela. El estudio realizado en 69 centros de salud a nivel nacional, arrojó que un total de 1.971 empleados sanitarios fueron afectados por la COVID-19 entre el lapso de enero y marzo de este año.
El personal con mayor contagio fue el perteneciente a enfermería con 412 contagios, seguido de los obreros 338 contagios y médicos 282 contagios.
En cuanto a las condiciones de trabajo, el informe arrojó que en las emergencias, no hubo tapabocas el 40% del tiempo; el 40% del tiempo no hubo guantes y el 59% no hubo protección ocular/ facial. En niveles suficientes solo había tapabocas el 8% del tiempo, guantes el 7% del tiempo y protección ocular/facial el 5%.
El informe contiene datos que siguen evidenciando la precariedad del sistema de salud, por lo que se puede inferir que, de no haber mejoras drásticas, este sector seguirá liderando la protesta por las justas reivindicaciones que no solo beneficiarían a los trabajadores de este ámbito, sino que son necesarias para todo el país.
En cuanto a los conflictos laborales, el gremio de la salud encabezó las protestas a nivel nacional con una participación del 30%, que representa un total de 1.348 manifestaciones.
Monitor Salud concluyó que durante los primeros 90 días del 2022 no ha habido cambios significativos en el sistema público de salud en Venezuela, razón por la cual los trabajadores sanitarios siguen a la cabeza en materia de conflictividad laboral, ya que su participación ha sido de las más beligerantes.