Para el próximo ciclo de invierno en función de las disponibilidades de insumos, fertilizantes y disponibilidad de maquinarias, se proyecta producir unas 810.000 toneladas de maíz blanco en 260 mil hectáreas y 152.000 toneladas de arroz en 45.000 hectáreas, de acuerdo con las proyecciones de la Sociedad Venezolana de Ingenieros Agrónomos y Afines y la Asociación Venezolana de la Agricultura Familiar.
La información la dieron a conocer en conferencia de prensa, el Ing. Saúl López, presidente de la AVIAA y Juan Carlos Montesinos, presidente de la AVAF, quienes anuncian que la producción de palma aceitera también tendrá un crecimiento en su producción pasando de 8.000 a 12.000 anuales; igualmente en la caña de azúcar que ya creció en un 20% en la última zafra, se espera que aumente un 10% adicional en la siembra de caña.
Explican que como organizaciones gremiales, están recomendando a los agricultores, que consideren la investigación de mercado, porque sí todos migran hacia la caña de azúcar, va a haber una sobreoferta que afectará el precio, además hay un problema con la capacidad de molienda, en los centrales que están activos la capacidad de molienda llegó a un 90%, lo que es muy bueno, pero si se sobrepasa la capacidad de molienda habrá problemas, ya que por otro lado hay 9 centrales que están en manos del sector oficial que están improductivos.
Se indica que el rubro arroz en total, porque se siembra en invierno y en verano, se estaría hablando de 60.000 mil toneladas.
Con respecto a los rendimientos del maíz, explicó que también se está proyectando un incremento que pasa de 3.5 toneladas por hectárea a 4.05 por hectárea.
Requerimientos
Las perspectivas para este año en cuanto a los requerimientos en fertilizantes se 158.412 toneladas para el ciclo de invierno, para atender a unas 500 mil hectáreas, y poder garantizar la siembra de cereales, cultivos tradicionales, leguminosas, musáceas, raíces y tubérculos, admitiendo que este año, Pequiven ha estado atendiendo a la demanda de fertilizantes del sector primario, destacando que el total de fertilizante que se colocó el año pasado fueron 152 mil toneladas, básicamente era urea, la roca fosfórica que se produce acá en Venezuela, en Lobatera, y esto debemos aprovecharlo. Hoy Venezuela tiene el precio más barato de la urea del mundo, ya que en promedio a nivel internacional cuesta mil dólares la tonelada y hoy Pequiven la vende entre 150 y 200 dólares la tonelada, y eso debemos sacarle provecho.
Explicaron que sembrar una hectárea de maíz el año pasado costaba 950$, para este 2022 se calcula que cueste 1.250 dólares, por el aumento de los agroquímicos y fertilizantes importados.
Otro de los requerimientos fundamentales para la agricultura en Venezuela es el financiamiento, ya que tienen años sin recibir créditos, afirmando que la política de encaje que ha venido implementado el régimen a través del Banco Central de Venezuela le ha hecho mucho daño a la producción nacional, en todos los sectores.
Mientras que el abogado Juan Carlos Montesinos, señaló que desde hace un año reposa en la Asamblea Nacional un proyecto de Ley de Agricultura Familiar, advirtiendo que de ser aprobado traería grandes beneficios a los productores venezolanos, además de garantizar la seguridad alimentaria del país, y hasta la fecha no ha sido discutido en el parlamento.