El Dren X es el principal sistema colector de las aguas pluviales al oeste de Barquisimeto, extensa red ubicada a lo largo de la parroquia Guerrera Ana Soto y que evidenció a la llegada de las lluvias, que la falta de limpieza y mantenimiento puede traer consecuencias muy negativas a la comunidad con inundaciones y los consecuentes daños materiales que afectan a la colectividad.
En este sentido, el entendido en materia hidráulica, ingeniero Sergio Borgel, manifestó a Elimpulso.com que muchos de los ramales que conforman el Dren X no han sido atendidos de manera adecuada en los últimos tiempos por la alcaldía del municipio Iribarren en lo que a mantenimiento se refiere y además, la falta de conciencia ciudadana contribuye a que los mismos no presten servicio de manera adecuada.
Muchos de los lechos de los canales y drenajes que conforman el Dren X son utilizados para botar basura. Allí se arrojan cauchos, colchones, muebles, cocinas y neveras viejas, desechos de gran volumen que por supuesto obstaculizan el flujo de las aguas de las lluvias y ocasionan desbordamientos como los que se observaron este jueves.
Pero si bien se trata de un problema de conciencia ciudadana, Borgel señaló que el mal servicio prestado por IMAUBAR, ente responsable de la recolección de la basura en el municipio Iribarren, lleva a que muchas personas tiren sus desperdicios en los lechos de las quebradas y las consecuencias son las que ya se conocen.
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«El mantenimiento de drenajes y quebradas de Barquisimeto es competencia de la alcaldía del municipio Iribarren«, indicó Borgel, quien acotó que no solo el sistema de drenajes del oeste de Barquisimeto se encuentra desvencijado porque al este de la ciudad la situación es muy parecida.
Dijo, que en muchos casos la falta de planificación urbana y la construcción de viviendas multifamilares y edificios de gran envergadura, han hecho colapsar las redes de aguas servidas y muchas veces las cloacas terminan desembocando en los canales o drenajes destinados a recoger las aguas de lluvia.
«Esto también puede generar un problema sanitario, ya que al producirse desbordamientos e inundaciones las aguas cloacales se mezclan con las aguas de los drenajes que salen a la calle y las personas afectadas se contaminan», indicó el ingeniero Borgel.
Por lo menos el 50% de las aguas que salen a las calles cuando se producen este tipo de contingencias son de cloaca, «y vemos personas que se mojan hasta la cintura y eso puede traer consecuencias de salud muy negativas«, apuntó.
Indicó para finalizar, que este tipo de situaciones extremas se deben a que el cambio climático ocasiona que los niveles de lluvia sean mayores debido a temperaturas más altas hay mayor evaporación y ello incrementa las descargas pluviales. «Estamos obligados a repensar los sistemas hidráulicos, hay que recalcular los volúmenes de agua y la capacidad de nuestros sistemas de drenajes a fin de actualizarlos y evitar este tipo de contingencias».