Elevar el salario mínimo a $900, ajustado a la canasta básica familiar, tal como lo establece la Constitución Nacional, reclamaron los jubilados y pensionados, quienes se concentraron, desde las primeras horas de la mañana, en todas las oficinas regionales del Seguro Social.
En efecto, en Caracas, cientos de personas se movilizaron hacia los alrededores del organismo para exigir aumento en el pago de las pensiones, alimentos, medicina, atención a la salud y seguridad social.
Desde muy temprano, una gran cantidad de personas comenzó a congestionar el tránsito automotor en apoyo a los jubilados y pensionados quienes, en su gran mayoría, salieron de las barriadas, con sus bastones, tapabocas, en sillas de ruedas y acompañados de sus familiares.
También hubo protestas en los hospitales, ambulatorios, con el apoyo de las organizaciones de la sociedad civil, entre ellos, gremio de la salud, sindicatos del sector público y privado, educadores y dirigentes sociales.
Homologar las pensiones a la canasta básica
Gritando consignas y mostrando pancartas, los abuelos reclamaron nuevamente al régimen de Nicolás Maduro cumplir con la Constitución Nacional, que establece que las pensiones y el salario mínimo se deben ajustar anualmente al costo de la canasta básica.
Se recuerda que el pasado jueves 3, Maduro aumentó el salario mínimo y las pensiones de siete bolívares a 126,32 Bs, más un bono de alimentación de 46 Bs que en total equivalen a 39,53 dólares, al cambio oficial.
“El salario mínimo y las pensiones se deben ajustar como lo ordena la Constitución, al costo de la canasta básica familiar, cuyo monto es de 900 dólares», respondió Emilio Lozada, presidente de la Federación Nacional de Jubilados y Pensionados (Fenajupv).
Los dirigentes de Fenajupv entregaron un documento con sus demandas a la presidenta del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS), Magaly Gutiérrez, quien también ocupa el cargo de ministra de Salud.
En el documento, los adultos mayores denunciaron que desde 2013 las pensiones, otorgadas por el IVSS, han estado perdiendo progresivamente su poder adquisitivo, y ese daño económico impide adquirir alimentos y medicinas.
Exigieron que esos productos, alimentos y medicinas, fueran otorgados por el régimen.
Sobre el aumento de 126,32 bolívares anunciado por Maduro expresaron que es insuficiente para comprar los productos de la Canasta Alimentaria, en 2.155,11 Bs ($448.05 ) y la Canasta Básica Familiar en 4.140 Bs ($900).
“Un pensionado debió ganar para enero de este año, 308 salarios mínimos para adquirir la Canasta Alimentaria”, dice el documento.
Se recuerda que en total son 5 millones 843 mil pensionados, entre ellos más de 30 mil personas en el exterior, quienes desde hace más de seis años no reciben ningún pago, denunció Lozada.
Esta es la tercera vez, desde el pasado 19 de enero y luego el 15 de febrero, que los jubilados y pensionados reclaman por mejores reivindicaciones sociales, en medio de un contexto hiperinflacionario y dolarización transaccional en el país.
El año pasado se contabilizaron 78 protestas, algunas de ellas fueron agredidas por grupos afectos al régimen, sin que hasta la fecha se haya producido alguna respuesta a sus demandas, denunció el presidente de Fenajupv.
Protesta internacional
Los reclamos de los pensionados también se realizaron en 23 países donde la Fenajupv tiene asociaciones afiliadas entre ellas Italia, Portuguesa, España, Reino Unido de Gran Bretaña, Alemania, Canadá y Estados Unidos.
En América Latina: Chile, Argentina, Uruguay, Paraguay, México, Panamá, Ecuador, Perú, Bolivia, Colombia, Puerto Rico, República Dominicana y Costa Rica, detalló Omar Vásquez, secretario general de la Fenajupv.