«Hasta que uno no ha amado a un animal, una parte del alma sigue sin despertar«, esta frase del escritor francés, Gnatole France, Premio Nobel de Literatura, es un abrebocas ideal para este trabajo periodístico que tiene como víctimas a un importante número de mascotas del estado Lara, en Venezuela.
Despedirse de una mascota tras su muerte, es una tarea difícil para cualquier persona que la haya amado de verdad. Por ende, durante años, algunos dueños larenses buscaron la alternativa que consideraron más digna para ese último adiós. Es allí donde surgió la opción de la cremación ecológica, la cual se convertía en una preciada oportunidad para conservar las cenizas de sus queridos animales. Sin embargo, después de un tiempo, algunas de estas personas descubrieron que aquellas cenizas que conservaban con afecto, no eran las de sus mascotas, ya que habían sido víctimas de una supuesta estafa por parte del ciudadano Raúl Alberto Acevedo Franco.
Todo inició aproximadamente en el año 2018 cuando Raúl Alberto Acevedo Franco entró en contacto con diversas fundaciones y organizaciones dedicadas a la crianza y rescate de mascotas. Desde entonces, según relata Dyna Lobatón, representante de Conciencia Animal, este señor se presentó ante todos como gerente de Sercrein, la única empresa en el estado Lara que ofrece el servicio de cremación ecológica para animales.
«Él estaba uniformado, incluso habló conmigo a través del número que estaba publicado como contacto de emergencia de Sercrein (…) por eso para mí nunca hubo dudas de que estaba hablando con la empresa», comentó Dyna Lobatón a Elimpulso.com para explicar de dónde surgió el lazo de su fundación con el señor Acevedo.
Durante casi 4 años, tanto la señora Lobatón como otras representantes de fundaciones y dueñas de mascotas estuvieron en contacto directo con el señor Acevedo para contar con sus servicios de cremación de animales. Sin embargo, fue a mediados de enero, luego de una polémica difundida a través de las redes sociales, que se «destapó» el caso de las presuntas estafas. Por ende, estas personas se dirigieron hacia las oficinas de Sercrein para consultar si sus animales, que habían sido entregados muertos al señor Acevedo, habían sido cremados en esta empresa, pero la respuesta fue negativa en muchos de los casos, lo que significó un dolor irreparable para los involucrados.
¿Dónde está Candy? ¿Dónde está Zoe, Thanos y Morena? ¿Dónde está Tommy? ¿Dónde está Sherekhan, Victoria y Celeste?, esto es lo que se preguntan los dueños de estas mascotas al enterarse que las cenizas que recibieron no eran las de sus amados animales.
Denuncia ante el Ministerio Público
Tras corroborar en la empresa Sercrein que sus mascotas no fueron cremadas como lo habían pactado con el señor Acevedo, diversas personas acudieron al Ministerio Público para emitir la denuncia por supuesta estafa y daño moral. Desde allí, estas personas contaron sus testimonios de cómo fueron engañadas por el ciudadano Raúl Acevedo.
«Desde el 2018 hasta acá, hemos llevado con Raúl Acevedo a 10 animalitos, y cuando fuimos a Sercrein, ninguno aparece», contó la señora Ester Lozada, representantes de Peludos de la calle. Contó a Elimpulso.com que durante todo este tiempo buscaban al señor Acevedo porque querían darle una despedida digna a sus mascotas, pero tras enterarse de la verdad, expresó que siente un inmenso dolor porque no saben qué es lo que guardan en sus hogares. «Estábamos recibiendo algo que no sabemos qué es, teniéndonos en los hogares pensando que eran sus cenizas«, comentó.
Luego de conocer la verdad del asunto, la señora Lozada analizó una situación que le pareció extraño en su momento: «Las cantidades de cenizas que nos entregaba nunca eran las mismas, variaban siempre a pesar de que los animales pesaran casi lo mismo», detalló.
Otro caso denunciado fue el de Nataly Nery, quien conoció que su preciado perro Golden, llamado Tommy, tampoco está incluido dentro de los registros de Sercrein. Ante esto, expresó: «Todo este tiempo estuvimos pensando que eran las cenizas de nuestro perro (…) Estoy segura que si esto ocurre con un humano, la justicia y la repercusión llegaría más rápido».
Asimismo, Dianne Peñaloza, representante de Amorela, contó que 4 de sus mascotas fueron entregadas al señor Acevedo y tampoco fueron cremadas por Sercrein: «Estamos sin saber si las cenizas que nos dieron eran de ellos, si los que nos dieron era carbón molido (…) queremos saber qué pasó con sus cuerpitos, adónde los tiró«, expresó.
Lo mismo ocurrió con 4 mascotas de Dyna Lobaton, de Conciencia Animal, quien destacó que al contactarse con el personal de Sercrein refutó el hecho de la aparición del número del señor Raúl Acevedo en las publicaciones de Instagram de la propia empresa de cremaciones ecológicas. Sin embargo, mencionó que la respuesta que le dieron es que el señor Acevedo nunca trabajó para ellos.
Como dato extra, se debe mencionar que dichas publicaciones donde aparece el número del señor Acevedo en las publicaciones de Sercrein fueron eliminadas, por ende, solo se tiene información debido a capturas de pantallas de las denunciantes.
Información obtenida de Sercrein
Al conocer las denuncias de estas personas, el equipo periodístico de Elimpulso.com se puso en contacto con Alejandro Blanchard, director de Sercrein, para conocer más detalles del caso, y a su vez, entender el motivo de la inclusión del número del señor Raúl Acevedo en sus publicaciones de Instagram.
Tal como se le expresó a la señora Lobatón, el ciudadano Blanchard comentó a Elimpulso.com que el señor Acevedo nunca trabajó para ellos, de hecho, mencionó que durante todo este tiempo ninguna de las personas que resultaron ser víctimas de fraude se habían dirigido hacia la empresa para corroborar si el ciudadano Acevedo trabajaba para Sercrein.
Alejandro Blanchard indicó que si estas personas hubiesen contactado de manera directa a Sercrein, nada de esto hubiese ocurrido. Además, agregó que el servicio de cremación para animales que prestan no genera dividendos económicos para la empresa, por ende, es una opción que brindan con costos mínimos solo para ayudar a los ciudadanos que quieran darle esta despedida a sus mascotas.
Con respecto a la inclusión del número del señor Acevedo en sus publicaciones de Instagram como contacto de emergencia, explicó que lo hacían para brindarle a sus clientes la oportunidad de contactarse con una persona en momentos de emergencia, sin embargo, alegó que esto no significa que haya existido un lazo laboral entre la empresa y Raúl Acevedo.
¿Dónde está Raúl Alberto Acevedo Franco?
Después de que se diera a conocer a través de las redes sociales la polémica referente a la supuesta estafa en la cremación de animales, el señor Raúl Acevedo dejó de su domicilio, bloqueó su cuenta en Instagram y su número telefónico aparece como apagado.
A pesar de que se emitió una denuncia oficial ante el Ministerio Público, las víctimas no tienen ningún tipo de información sobre el paradero de este sujeto, quien es acusado por supuesta estafa y daño moral. Cabe destacar que el costo de las cremaciones variaban según el tamaño y peso de los animales, sin embargo, los costos iban desde 60$ en adelante.
Es importante mencionar que las personas que acudieron al Ministerio Público esperan que el caso sea atendido con la brevedad, ya que su objetivo es que el señor Acevedo aparezca y se haga justicia.
Inicio de las sospechas
Con respecto al inicio de las sospechas referentes a las supuestas estafas realizadas por el señor Raúl Acevedo, es importante mencionar que todo arrancó tras una polémica conocida a través de las redes sociales por la cuenta de Instagram «@dondeestatom» la cual denunció una irregularidad entorno al paradero de un perrito llamado Tom.
La dueña de Tom contó que tras llevar el cuerpo de su mascota fallecida a una reconocida clínica ubicada en el municipio Palavecino, quienes sirvieron de enlace para contactar a Raúl Acevedo y así realizar el proceso de cremación, surgieron una serie de irregularidades, las cuales concluyeron en una visita de la dueña de Tom a las oficinas de Sercrein, donde les confirmaron que las cenizas que le habían entregado mediante los supuestos servicios del señor Acevedo, no eran las de su perro, ya que la empresa no tenía ningún registro de haber cremado a la mencionada mascota.