Hong Kong reportó 15 muertes y más de 6.000 nuevos casos confirmados de COVID-19 por segundo día consecutivo en una oleada de contagios que, según la líder del territorio semiautónomo chino, está «desbordando» los hospitales.
También el sábado, el gobierno anunció planes para que cuadrillas de obreros de la china continental levanten unidades de aislamiento con capacidad para 10.000 pacientes luego de que la saturación de los hospitales obligó a los pacientes a esperar al aire libre en pleno invierno.
En las últimas 24 horas se confirmaron 6.063 nuevos casos, elevando el total del territorio a 46.763. La cifra estuvo ligeramente por debajo de las 6.116 infecciones del jueves, pero es uno de los registros diarios más altos en la región desde el inicio de la pandemia.
Hong Kong ha reforzado los controles en viajes y en la actividad comercial en un intento por contener el repunte. El viernes, la jefe ejecutiva, Carrie Lam, dijo que las elecciones para su cargo se demorarán seis semanas, al 8 de mayo, por “riesgos para la salud pública”.
Lam afirmó el lunes que los hospitales de la ciudad estaban sobrepasados. El gobierno señaló que las nuevas unidades de aislamiento y tratamiento se instalarán en los distritos de Penny’s Bay y Kai Tak.
Los equipos de operarios continentales tienen experiencia en la construcción rápida de hospitales luego de levantar dos, uno con 1.500 camas y otro con 1.000, en Wuhan, la ciudad donde comenzó la pandemia, en 10 días a principios de 2020. Además, convirtieron 16 edificios más en hospitales de cuarentena.
El gobierno de Hong Kong también usará habitaciones de hotel, instalaciones deportivas y viviendas públicas de reciente construcción para alojar a los pacientes, apuntó Lam.
El director de la Autoridad Hospitalaria, Tony Ko, se disculpo el sábado en un programa de radio porque los pacientes tuviesen que esperar a la intemperie pese al frío del invierno y dijo que la mayoría fueron trasladados ya al interior de los centros o a otras instalaciones.