«El hombre es el único zorro que instala una trampa,
le pone una carnada y luego mete la pata».
John Steinbeck
El silbato de Galton también conocido como silbato silencioso, emite un sonido en el rango ultrasónico inaudible para los humanos, pero perceptible para algunos animales, incluidos los perros y gatos domésticos y se utiliza para su entrenamiento. Es conocido como silbato de perros o para perros, porque al ser especialmente escuchado por ellos es utilizado como reforzador condicionado o para marcar una conducta deseada y también como un comando. En fin, los oídos de los perros son sensibles a su rango ultrasónico, por lo que estos animalitos responden a su emisión.
Pues bien, hay actos que realiza el Coronel psicópata valiéndose de artimañas mediante las cuales abusa del personal que labora en la institución y que como depredador social, él ve como sus presas y las convierte en sus víctimas. El Coronel psicópata, narcisista, licántropo y voyerista; es un manipulador y en su función como jefe es un abusador, mentiroso, maltratador, manipulador y con una valoración grandiosa de su yo.
Entonces este depredador social, este desalmado, este maldito, que se cree con la patente de corso para atacar la autoestima de las personas a las que siente como inferiores a él , porque sufre de grandiosidad, se cerciora de violar los derechos humanos de sus víctimas , de sus presas, porque está apoyado circunstancialmente por situaciones de modo , de tiempo y de personas que alguna vez fueron sus inferiores pero que ahora son sus celestinas; y en función del poder efímero que maneja , le gusta lucirse y henchido, pedante y jactancioso ante sus monos voladores que le congracian sus fechorías hace alarde de sus maléficas estrategias de manipulación y de control, de sus oscuras tácticas ofensivas.
Este Coronel que nunca llegará a ser General porque se lo impidieron como sanción disciplinaria por sus sucios expedientes y le impusieron un retiro obligado , es un maltratador psicológico, es una persona controladora sin pundonor que al saberse una rata y consciente de una valoración negativa propia , porque se sabe y está convencido de ser un delincuente y lo exterioriza voceando que no tiene santidad ; busca sentirse la estrella en el trabajo o en los escenarios donde ejerce su actividad parasitaria o pone en marcha su parasitosis entre otras marramucias , a costa de ofender o disminuir la autoestima de las personas a las que envidia o que en su deformado cerebro por el defecto de su amígdala cerebral anómala cree que lo envidian a él. Un hombre con baja tolerancia a la frustración, que disfraza con grandiosidad la inseguridad en sí mismo, la baja capacidad para gestionar sus propias emociones y su ausencia de empatía hacia los demás. Emprende entonces, mecanismos que le sirvan de combustible para alimentar su narcisismo y sentirse alguien en su imaginaria cerebral aunque sea ficticiamente superior a aquellas personas a las que ataca porque las envidia y de las que quisiera tener o poseer sus virtudes o sus talentos. Porque de dinero y de inusitado patrimonio personal se ha apoderado criminalmente burlándose de la sociedad y de la confianza que en él han puesto para gerenciar empresas del Estado, dándoles dolosamente un vuelco ilegal al giro lícito de esas corporaciones.
Entonces este Coronel psicópata, haciendo uso del Gaslighting, tiende a colocar celadas psicológicas ofensivas y denigrantes diseñadas por su narcisismo y su mente enferma, donde se cree superior intelectualmente a las demás personas, porque es una de las perturbaciones más definitorias de esta aberración genética que nunca será General, pero que retoza morbosamente luciéndose ante sus monos voladores o monos jalabolas y particularmente ante su adúltera mujer la conocida borracha, para sentirse algo así como un antihéroe que no respeta a nada ni a nadie y que juega con la mente de los trabajadores, empleados y obreros de la empresa , de los que está patológicamente convencido que son de su propiedad y no hombres y mujeres libres que trabajan para una empresa del Estado.
Pues bien, como este retorcido personaje del que da repugnancia referirse y que solo por razones docentes e informativas han de mencionarse las características y peculiaridades de su personalidad o de su psicopatía o personalidad psicopática que es un trastorno antisocial de la personalidad y para que el colectivo , la comunidad toda se entere del modus operandi de personajes como estos que están integrados , camuflados , infiltrados, mimetizados en la sociedad haciéndose pasar por gente normal para poder cometer sus delitos , además de todas las barbaridades que en su mente puede tramar y desarrollar en perjuicio de cualquiera. Las entregas de este trabajo son alertas, para que el común logre detectar al psicópata que puede tener a su lado e incluso que lo esté haciendo su víctima y su presa, porque lo ve como una persona “inocentemente carismática” entonces cae en sus trampas y en sus psicopatías.
Es preciso apuntar aquí lo que es la mitomanía y de la que sufren los psicópatas como este Coronel delincuente. La mitomanía es un trastorno del comportamiento. La persona que lo padece es adicta a mentir. El psicólogo Juan Moisés de la Serna, considera que «el mitómano busca con sus engaños la aceptación de los demás.
¿Y cómo hace uso para ejercer maldad el Coronel psicópata, narcisista, licántropo y voyerista a través del silbato de Galton?
Desde luego, mencionar el silbato de Galton es para dejar en evidencia a este criminal que nunca llegará a General, es un símil comparativo para poder explicar cómo comete el abuso este Coronel psicópata, personaje maléfico de deformada alma. Este militar malandro como a todo psicópata le provoca una morbosa satisfacción hacer sentir mal a las personas.
El psicópata sin decir el nombre de su víctima, sino refiriéndose a actividades que ella realiza, como quien habla de manera generalizada pero que la intención es causar indisposición a alguien en específico, traficando con la hipocresía, le atribuye conductas o situaciones que son falsas, pero que solo la persona abusada está escuchando porque ha despertado su interés, porque le causa afrenta y el resto de la audiencia ni sabe de qué se habla, salvo los siniestros monos voladores complotados para la maldad en acuerdo con su titiritero el Coronel felón.
El Coronel, expone verbalmente información que va directamente hacia los oídos de su víctima – nadie más entenderá lo que el psicópata expone y dice , sino solamente sus presas -, y ese verbo satanizado va como saetas cuyo blanco es la persona o las personas a las que él quiere abusar y que solo pueden tener como destinatario alerta a las víctimas o presas del Coronel psicópata, porque la persona que está siendo abusada con las palabras que salen de la jeta de este licántropo personaje , sabe que ella es la única de la audiencia que conoce de lo que se está hablando – supuestamente – , de lo que se está tratando. Pero que el Coronel con su discurso, delante de todos, burlándose de su víctima, de su presa, de la dignidad humana, impune y flagrantemente para los oídos de las demás personas, está abusando del empleado que está sorprendido por la osadía de este hombre, por el atrevimiento de este maligno Coronel de exponer en público como verídicas cosas y situaciones falsas o metamorfoseadas con las que persigue maltratar e irrespetar, indisponer psicológicamente o causarle algún efecto dañino o dañoso a un ser humano que no conviene tener en la empresa porque es honesto y decente e institucionalista, o simplemente porque lo ve como su enemigo o porque no se arrastra ante él como sus monos voladores.
Dicho de otro modo, el Coronel psicópata dice lo que está seguro que será escuchado aparentemente solo por la persona a quien abusivamente va dirigido para jugar con su mente e irrespetar su persona y que sabe que ha de causarle a su víctima algún efecto dañoso, o inquietante, o perturbador porque es mentira o está deformada esa información en su dimensión o porque es falsa. De tal manera que los que escuchan no se toman para sí lo que expone falsamente el Coronel, pero que causa algún efecto psicológico abusivo en la persona que sí sabe de lo que habla el maldito militar, porque lo han inventado o lo han deformado o le han dado un giro perverso.
En reuniones, en grupo de personas, ante alguna convocatoria donde pueda lucirse y hacerse la estrella ante sus monos voladores, o ante la presencia de invitados en cualquier conferencia o actividad donde haya audiencia o cuando convoca la mesa de la infamia, el psicópata abusa de la personas endilgándole a sus víctimas; exponiendo sucesos, situaciones, anécdotas, describiendo conductas o acciones que él cree o está convencido de la veracidad de las mismas o que él inventa porque es mentiroso compulsivo – un mitómano- ,o porque sus tenientes o la tropa de los necios se lo han informado y él es oído fértil para creer las mentiras cuando dañan a sus presas , o cuando le da un significado acomodaticio a algunas determinadas acciones para salirse con la suya en sus delitos y crímenes ejecutados y programados. Y entonces hace como el efecto que causa el silbato de Galton que solo sus destinatarios pueden oírlo. Y con ello quiere condicionar conductas. Es un militar lleno de maldad, que nunca llegó a General.
«…si no eres consciente de que otras personas pueden tener mala intención, caerás en sus trampas».
Natsume Soseki
Crisanto Gregorio León
