«El buen patrón«, dirigida por Fernando León de Aranoa, se alzó con el premio a la mejor película en la 36 edición de los Premios Goya y fue la triunfadora de la noche de premios con seis galardones de los veinte a los que optaba.
La cinta se llevó el Goya a mejor película, director (León de Aranoa), actor protagonista (Javier Bardem), guion original, música y montaje.
León de Aranoa agradeció al público «que está regresando a las salas poco a poco, pese a los años de miedo e incertidumbre», y resaltó que al cine le toca ahora «devolverles su cariño» porque «una película es una historia de amor con el espectador y nosotros estamos dispuestos a renovarlo cada año».
El productor de la cinta, Jaume Roures, se refirió a la cultura como «el nervio de la sociedad» y defendió que es lo que «nos hace más humanos, nos aleja del machismo, del talibanismo, de la violencia…».
La película también representó a España en la contienda por el Oscar a la mejor película internacional, pero no llegó a las nominaciones finales.
Una sátira sobre el mundo laboral protagonizada por Javier Bardem, que llegaba como gran favorita a estos Goya, con veinte nominaciones, y que competía en esta categoría con «Madres paralelas» de Pedro Almodóvar, «Maixabel» de Icíar Bollaín, «Libertad» de Clara Roquet y «Mediterráneo» de Marcel Barrena.
La cinta de Bollain precedió tres premios Goya, el mismo número que «Mediterráneo», y «Las leyes de la frontera» fue la sorpresa de la noche al conseguir cuatro galardones, de categorías técnicas.