Desde tempranas horas de la mañana de este viernes 14 de enero el pueblo del estado Lara ha manifestado su amor y devoción por la Divina Pastora. El día inició con un maratón en honor a la Virgen, el cual fue un acto espontáneo de los fieles, seguido de la Eucaristía en la iglesia de Santa Rosa y minutos más tarde la sagrada imagen emprendió su recorrido por Barquisimeto y Cabudare.
Con la luz del sol, algunos barquisimetanos decidieron realizar su propio maratón en honor a la Divina Pastora, pese a la suspensión de las actividades relacionadas con la procesión y aglomeraciones en prevención ante la COVID-19.
Según manifestaron a Elimpulso.com, realizaron esta actividad con la finalidad de seguir con la tradición aunque entienden las restricciones ordenadas por las autoridades.
Otros devotos salieron a caminar desde temprano para cumplir alguna promesa por el milagro concedido.
Tal es el caso de Yohana Romero, que luego de superar una fuerte enfermedad cumple la promesa de caminar junto a ella hasta la catedral de Barquisimeto.
Una historia similar tiene Ronald Torrealba, quien lleva 15 años pagando una promesa a la Divina Pastora y este 14 de enero no será la excepción.
El feligrés relató entre lágrimas a Elimpulso.com que hizo una petición especial en el año 2006 a la Virgen por la sanación de su hijo recién nacido y al curarse, decidió pagar esa promesa caminando descalzo en el recorrido que anualmente hace la sagrada imagen.
Pasadas las 7:00 de la mañana en la iglesia del pueblo de Santa Rosa daba inicio la Santa Eucaristía, la cual fue presidida por Monseñor Ubaldo Santana, Arzobispo emérito de la Arquidiócesis de Maracaibo.
Monseñor pidió a los fieles orar ante «el considerable aumento de los que viven en la pobreza y el abandono».
Aproximadamente a las 9:21 de la mañana, la sagrada imagen salió del templo de Santa Rosa para iniciar el recorrido por las calles de la capital larense.
La feligresía y algunas autoridades aguardaban dentro del monumento, donde además la Orquesta del Conservatorio Vicente Emilio Sojo la esperaba para rendir un homenaje musical a los pies del monumento.