El número de nuevos contagios de coronavirus en la última semana subió en torno a un 55%, aunque el número de muertes en el mundo se mantuvo estable, según indicó la Organización Mundial de la Salud en su último reporte sobre la pandemia.
En el informe semanal, publicado el martes por la noche, la agencia de salud de Naciones Unidas documentó unos 15 millones de nuevos casos de COVID-19 la semana pasada y más de 43.000 muertes. Todas las regiones del mundo reportaron un aumento en los casos de COVID-19 salvo África, donde las autoridades registraron un descenso del 11%.
La OMS indicó la semana pasada que se había alcanzado un récord de 9,5 millones de nuevos contagios en una semana, lo que describió como un “tsunami” de la enfermedad.
La contagiosa variante ómicron sigue definiendo la pandemia en todo el mundo y acorrala a la antes dominante variante delta, dijo la OMS. Ómicron, detectada primero en Sudáfrica a finales de noviembre, supone casi el 59% de los genomas secuenciados y compartidos con la base pública de datos más grande disponible. Ómicron ha demostrado que tarda menos en multiplicar los casos por dos y hay crecientes pruebas de que puede “evitar la inmunidad”, añadió la agencia. La OMS también indicó que numerosos estudios la describen como menos grave que variantes anteriores.
Tras un brusco aumento de los casos de ómicron en Sudáfrica tras la identificación inicial de la variante, la epidemia descendió con rapidez, y los experto creen que la ola ya ha pasado. La OMS dijo esta semana que tras un aumento continuado de los casos de COVID-19 en toda África, los contagios habían remitido esta semana por primera vez.
Científicos en Gran Bretaña y Estados Unidos decían que había pruebas iniciales de que la ola de ómicron podría haber tocado techo, aunque aún no tenían certezas sobre cómo podría desarrollarse la siguiente fase de la pandemia. La OMS señaló que América batió su récord de casos de COVID-19 este semana con un aumento del 78%, debido principalmente a Estados Unidos.
Europa registró un 31% más de contagios y un descenso del 10% en las muertes.
El aumento más grande de los contagios de COVID-19 se detectó en el sureste de Asia, donde los casos aumentaron en más de un 400%, con las cifras más altas en India, Timor Oriental, Tailandia y Bangladesh. Las muertes en la región cayeron un 6%.
La variante ómicron se expande con más facilidad que otras, y ya es la dominante en muchos países. También infecta con más facilidad a personas vacunadas o que ya se contagiaron de versiones anteriores del virus. Sin embargo, estudios preliminares muestran que ómicron es menos propensa a provocar enfermedad grave que la versión delta anterior, y que la vacunación y las dosis de recuerdo siguen prestando una fuerte protección ante una enfermedad grave.