Las órdenes dadas por Nicolás Maduro al presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, en el sentido de investigar a los diputados del parlamento electo en el 2015, no extraña a la oposición.
El abogado Edgar Zambrano, vicepresidente nacional de Acción Democrática en la resistencia, declaró a Elimpulso.com, que la dinámica política se encuentra en medio de una gran incertidumbre.
Un país que está colapsado por los cuatro costados tiene una respuesta ante un evento de plena legitimidad, otorgada por los electores venezolanos en el año 2015.
Maduro no anuncia novedad alguna a los venezolanos, expuso. Su narrativa acerca de una investigación a los parlamentarios no tiene elementos políticos, ni jurídicos. Es una argumentación inicua desde todo punto de vista. No presenta nada para el debate porque no hay elementos para la réplica. Y se trata de un discurso trillado.
Someter a investigación a los diputados de la auténtica Asamblea Nacional o a cualquier persona que disienta demuestra que el abuso de poder y el terrorismo de Estado están presentes en este régimen.
Un país con 245 presos políticos no habla nada bien de su institucionalidad, ni de la autonomía e independencia de poderes, ni del derecho a disentir que tiene carácter constitucional.
Estamos oyendo el mismo discurso que en diferentes oportunidades ha pronunciado y sus amenazas no van a privar la presencia de los ciudadanos en la calle frente al reclamo social, ni tampoco eliminar el ímpetu democrático de la sociedad venezolana como lo estamos observando en el estado Barinas, donde los barineses han concurrido a las urnas electorales propinándole una derrota al régimen, el cual la desconoció, pero que será ratificada el próximo domingo 9 de esta semana.
Estamos en la fase de agotamiento en la que los pueblos deciden cambiar, expresó. Venezuela está decidida a cambiar. Ahí están los números del 21 de noviembre cuando la oposición sacó más de cuatro millones de votos contra los tres millones de quienes usurpan el poder.
Éstos saben que el pueblo se cansó de sus promesas, del modelo político y de sus políticas públicas, sostuvo el dirigente de la tolda blanca. Lo que les queda es el tono amenazante, bravucón y sin sentido.