Autoridades sanitarias de Corea del Sur confirmó este lunes la primera muerte relacionada con la nueva variante ómicron del coronavirus.
La Agencia de Prevención y Control de Enfermedades de Corea dijo que el fallecido tenía más de 90 años y vivía en un hogar de ancianos en la ciudad sureña de Gwangju. La persona recibió una segunda dosis de la vacuna COVID-19 en octubre.
Un total de 21 personas en el asilo dieron positivo a COVID-19, tres de ellas con la variante ómicron, desde que se informó el primer caso allí el 24 de diciembre.
Se descubrió póstumamente que el paciente contrajo la variante ómicron. Las autoridades sanitarias estaban examinando si otra persona que murió en las instalaciones de Gwangju también se infectó con la variante.
Hasta ahora, Corea del Sur ha confirmado 1.318 casos de la variante ómicron. Los expertos dicen que probablemente esta reemplazará pronto a la variante delta para convertirse en dominante en el país.