Luis Florido, dirigente nacional de Un Nuevo Tiempo y quien fuera el candidato a la gobernación por el G-4 y otras organizaciones, es del criterio que el análisis de la oposición sobre su papel político tiene que ser muy profundo.
Porque los resultados obtenidos en el año que termina son, indudablemente, lamentables por no haberse consolidado la unidad, que demostrara fortaleza ante la opinión pública y contudencia frente al régimen.
AD, Voluntad Popular, Primero Justicia y Un Nuevo Tiempo, que conforman el G-4, siguen siendo el mayor referente de la oposición y, por tanto, tienen una alta responsabilidad frente al país, porque son organizaciones nacionales y como tales tienen representación en cada rincón del país.
¿Cómo asumir los resultados en un momento tan difícil, se preguntó durante sus declaraciones a Elimpulso.com. Tenemos por delante grandes retos: lograr una unidad fuerte, amplia, decisiva y contudente. Entusiasmar a la población que hoy se encuentra descontenta. Y mantener el apoyo internacional, porque en el momento en que constitucionalmente se produzcan los cambios esperados, requerimos de grandes recursos para recuperar el país y consolidar la democracia.
Cuando existe un régimen represor, en el ojo de la Corte Penal Internacional que lo investiga por delitos de lesa humanidad, y que está cuestionado por los principales países democráticos del mundo que lo han aislado, es preciso que la oposición sea dinámica, acertada e inteligente.
De modo, pues, que los días que se avecinan tienen que ser aprovechados oportunamente y, por lo tanto, el análisis profundo que se hace debe dar el punto de partida para estrategias exitosas, sobre todo porque la Constitución nos da las condiciones para que se logre el cambio que requiere el país.