El papa Francisco se reunió con una familia afgana a la que conoció en su viaje a Grecia y a la que ayudó a asentarse en Italia debido a que el hijo menor necesita atención médica.
El pontífice se reunió con la familia al final de su audiencia general de los miércoles, durante la cual renovó su pedido a los gobiernos del mundo a que ayuden a los migrantes.
“Lo único que tienen que hacer es abrir una puerta, la puerta del corazón. Que no nos falte eso en esta Navidad”, declaró Francisco.
El papa visitó Grecia y Chipre entre el 2 y 6 de diciembre y se reunió con refugiados en un campamento en la isla griega de Lesbos. Fue la primera vez que visitó la isla desde que fue allí en 2016 y trajo a un grupo de migrantes sirios a bordo en su avión.
Estando allí, el papa se enteró de las necesidades médicas del pequeño afgano, de un año y medio de edad. El Vaticano no ha identificado a la familia ni ha revelado cuáles eran las necesidades médicas del niño. El pequeño había caminado hacia los escalones a la entrada del salón donde se celebró la reunión y allí estaba cuando llegó el papa.
El Vaticano, en cooperación con la organización caritativa Sant’Egidio, también ha trasladado a Italia a varios migrantes de África y Siria que llegaron a Chipre.