El número de migrantes y refugiados venezolanos sigue en aumento a pesar de las restricciones a la movilidad internacional que ha provocado la pandemia, es por ello que la Organización de Naciones Unidad (ONU) considera que los refugiados venezolanos necesitan más ayuda y en ese sentido lanzó un plan de financiación regional, este jueves.
Acnur presentó hoy un plan que requiere 1.790 millones de dólares de fondos para financiar los programas de asistencia a la población venezolana en 17 países de Latinoamérica y el Caribe, la cual ha llegado a seis millones, de acuerdo con las cifras de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados.
La cuenta que actualmente decanta en esta cifra (6.000.000 de migrantes) lleva registro desde el año 2015, cuando los venezolanos comenzaron a abandonar el país debido al agravamiento de la crisis económica, social y política.
La gran mayoría de estos venezolanos se encuentran en otros países de la región y para responder a «sus crecientes necesidades».
Acnur señaló que durante la pandemia los venezolanos no han dejado de llegar a otros países, utilizando rutas informales -en muchos casos a pie- ante el cierre de las fronteras oficiales que se produjo con el fin de contener la propagación del coronavirus.
En un comunicado de Acnur, se indica que esta situación ha expuesto a los venezolanos a grandes peligros como condiciones climáticas extremas, amenazas de traficantes de personas o explotación y abusos por parte de personas que les cobran por hacerles cruzar las fronteras.
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El plan del Acnur incluye proporcionarles servicios humanitarios básicos en las áreas de salud, alojamiento, alimentación, agua e higiene.
También comprende proyectos para ayudar a la integración a largo plazo de los venezolanos que ya viven varios años en otros países, favoreciendo su acceso a la educación, al empleo y ayudando a la regularización de su situación migratoria, detalló Acnur.