Astronautas chinos trasmitieron el jueves una clase de física desde la estación espacial del país, que aún está en construcción.
Durante la clase se demostró cómo la ingravidez afecta la fuerza de sustentación, el movimiento de los objetos y la óptica.
Estudiantes de Beijing, la región semiautónoma de Hong Kong y otras tres ciudades ametrallaron a los astronautas con preguntas sobre la vida en el espacio y recibieron un tour virtual de la estación. El evento también fue emitido en vivo para el público.
Wang Yaping, la única mujer a bordo de la estación, fue la profesora con ayuda de Ye Guangfu, mientras el comandante en jefe Zhai Zhigang manejaba la cámara. Wang impartió una clase similar a bordo de una estación experimental en 2013.
Los tres arribaron a la estación en octubre para una permanencia de seis meses con la tarea de preparar el módulo principal Tianhe para el arribo de dos módulos adicionales, el Mengtian y el Wentian, en vista de finalizar los trabajos a fines del año próximo.
Wang es la primera mujer china que realiza una caminata espacial. El mes pasado ella y Zhai pasaron seis horas en el exterior del módulo para instalar equipos y probar el brazo robot de mantenimiento.
La misión Shenzhou-13 es la más larga desde que el país asiático envió un ser humano al espacio en 2003, siendo apenas el tercero que lo hace después de Rusia y Estados Unidos.
Los tres son la segunda tripulación a bordo de la estación permanente, que al completarse pesará unas 66 toneladas, mucho menos que la Estación Espacial Internacional, que está en órbita desde 1998 y pesa unas 450 toneladas.
Junto con la instalación de los equipos, la tripulación está evaluando las condiciones de vida en el módulo Tianhe y realizando experimentos de medicina espacial y otras disciplinas.
El programa espacial chino no tiene acceso a la Estación Espacial Internacional debido a los temores de Estados Unidos por sus conexiones militares.
