Según palabras del economista Luis Vicente León, presidente de Datanálisis, la participación en los comicios de este 21 de noviembre estuvo dentro de los rangos reportados en las encuestas.
El mapa queda fundamentalmente rojo, como se esperaba y la oposición logra tres estados, divididos entre la MUD y la Alianza, también dentro de lo proyectado. «Los resultados traen pocas sorpresas«, indicó.
Señaló, a través de su cuenta en Twitter, que este resultado es lamentable para la oposición, pues se definió fundamentalmente debido a la abstención y la división», señaló el experto a la vez que manifestó que las dos únicas sorpresas (el triunfo opositor en Cojedes y la derrota de la oposición en Lara) se debieron: la primera a la mayor participación que el promedio nacional en Cojedes y la segunda a la división lamentable y absurda en Lara, que impidió un triunfo que estaba cantado.
«El objetivo buscado por la oposición moderada al promover la participación en las elecciones regionales, era validar partidos y líderes para promover cambios en la propia oposición. Resulta evidente que este resultado, muy negativo, no logra ese objetivo», apuntó León.
Dijo, que llama la atención que los únicos líderes opositores que lograron éxito en esta contienda fueron actores tradicionales que provienen de la Cuarta República, un golpe importante a las propuestas de renovación generacional.
Los resultados dejan a la oposición multifracturada en tres grandes partes: 1) MUD, 2) Alianza y 3) Gobierno Interino. «Sus diferencias evidentes van a producir mucha batalla interna por la conformación de la representación opositora del futuro.
«Lo más triste es que la suma de los votos de la MUD y la Alianza en todo el país muestra una fuerza contundente contra el gobierno. Unidos hubieran ganado un número significativamente superior de gobernaciones. Un error lamentable», dijo para cerrar Luis Vicente León.